A raiz de los accidentes en el ingreso y el egreso de los usuarios desde los andenes hacia los vagones, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires efectuó un relevamiento en los subtes. Personal de la Defensoría observó los espacios de separación existente entre el borde del andén y la formación, como así también las medidas de seguridad obligatorias para evitar situaciones de riesgo de los pasajeros.
Se estudiaron más de 90 formaciones de las estaciones que congregan la mayor parte de los usuarios:
Perú, Lima y Plaza Miserere de la Línea A
Pellegrini y Callao de la Línea B
Diagonal Norte, Avenida de Mayo, Moreno e Independencia de la Línea CCatedral, 9 de Julio y Tribunales de la Línea D
Bolívar, Independencia y Jujuy de la Línea E
Plaza Once y San Juan de la Línea H
En todas ellas se encontraron distintas irregularidades referidas a las medidas preventivas y las correspondientes advertencias para el uso correcto de los espacios en los andenes. Estas irregularidades se evidenciaron al comparar diferentes líneas pero también distintas estaciones pertenecientes a la misma línea. A modo de ejemplo, no hay zona marcada de prevención en el andén de la línea D, estación 9 de Julio, pero sí en Catedral o Tribunales.
Por otra parte, se detectaron importantes diferencias en la distancia entre vagones y andenes que van de los 10 a 12 cm. en la línea C. En este sentido, no existe una normativa específica relativa a las medidas o condiciones de seguridad respecto de los pasajeros entre el andén y el tren, aunque sí está especificado en lo relativo a la accesibilidad en los pliegos de las ampliaciones de las líneas.
A nivel internacional este tema es tenido en cuenta por su relevancia en prevención de accidentes, tanto en indicaciones escritas como mediante las comunicaciones por altoparlante. En Londres, la cita «mind the gap» (tenga en cuenta el hueco) está incluso dibujada en el suelo de los andenes, y en San Pablo se hace también énfasis en el desnivel entre el andén y la formación. Estas modalidades, que se repiten en París, Estocolmo y otras ciudades, toman forma de advertencias para concientizar a los pasajeros sobre los accidentes que pueden prevenirse con cambios de conducta individuales.
La Defensora del Pueblo, Dra. Alicia Pierini, subrayó que “aunque no esté legislado, los numerosos accidentes sucedidos justifican la inmediata intervención de la empresa Metrovías”.