El protagonizado por empleados de Subterráneos, encargados de “liberar los molinetes” en horarios pico, en repudio al aumento que rige respecto al costo del pasaje a partir del día de hoy, viernes 6 de enero del 2012. Por qué digo estratégico y grosero. Simplemente porque con ello, solo pretenden obtener el apoyo del usuario, cuando en pocos días más, realicen un “movimiento de fuerza”, que es otra cosa, en demanda de recomposiciones salariales. ¡Más clarito, échele agua!
Nadie me dio bola, así no tenga la menor intención ni posibilidad de convertirme en referente. Lo fue Juan Carlos Blumberg en su momento; le acompañe desde el anonimato con presencia física en sus tantas convocatorias públicas. Para entonces supuse que ese padre a quien jamás le perdonamos el simple hecho de no negar su condición de Ingeniero, se constituiría en ese referente del que hoy carecemos. Se trató desgraciadamente, de otra de las tantas reacciones espasmódicas que nos caracterizan. Nos encargamos de crucificarle, cuando todavía no sabemos a ciencia cierta, si los títulos que se arrogan algunos funcionarios de primer nivel, cuentan con el “aval” de las Universidades correspondientes. También bregué porque los juicios a los militares, se realizaran ajustados a Derecho, así no fueran los Tribunales Ordinarios, los encargados de juzgarles…nadie me dio pelota, y miles de “milicos” se siguen pudriendo en cárceles comunes, en tanto los “Montos” ocupan cargos relevantes en el Poder. Apenas la actitud de algunas pocas mujeres de “cojones”, luchan por ahora infructuosamente, en procura de que se haga “verdadera justicia”. Apenas algunos vecinos se congregaron y congregan en la puerta de calle de la vivienda donde vivía ése o esos ciudadanos “masacrados” por la mano criminal…simpre, claro está, con las mujeres en primera línea, así como se “utiliza” a las mujeres que han abrazado la carrera de alguna fuerza de seguridad, para contener a “esa caterva inmunda de encapuchados”, quienes munidos de enormes “fierros” y bombas molotov, hacen y deshacen a voluntad, sin que se tome sobre ellos, medida segregativa alguna.
¿Y ahora Ud., qué pretende?; ¿que me sume a una protesta general debido al inexorable “blanqueo” de una política económica disparatada?. ¡No cuente conmigo; y ojo, pero mucho ojo; padeceré tanto o más que Ud., las consecuencias, solo que ésta vez me la “comeré”, al mejor estilo Zaffaroni u Oyarbide. ¡Póngale la música que más le plazca; descargue si prefiere sobre mí, toda esa furia contenida a través de un increíble grado de candidez, por no decirle otra cosa.
Emulando a Fito Páez, debo confesarle que toda esta parafernalia que incluye el montaje circense en torno a la operación de La Señora, me asquea.
Ayer mismo, tuve oportunidad de leer una nota que se realizara a Jorge Lanata, a través de un medio periodístico escrito. ¡Semejante periodista, uno de los pocos siempre dispuesto a poner las bolas sobre la mesa, dijo en un pasaje de la misma, que “muchas veces se sentía un cagón”. ¡Qué queda para uno!. Piénselo, y después, recién después, actúe. Ocurre que como seres humanos, tenemos la posibilidad que se le niega al resto de los animales; simplemente la posibilidad de ELEGIR aquello que queremos para nosotros, y aquello que deseamos evitar.
