El asesinato de un joven muy querido por los vecinos desató un estallido
TODOS POR JULIO
“Las torres” ocupan solo una manzana; la comprendida entre las calles Francisco Fernández de la Cruz, José León Suárez, Chilavert y Saladiyo. Todo comenzó el viernes cerca de la medianoche cuando Julio Benítez, habitante de estos conflictivos monoblocks comenzó una discusión –una más- con los tres hermanos Fuentes.
Video: Justicia por Julio Benítez
Los hermanos se vienen erigiendo hace rato en amos y señores del “medio” de las torres. El “medio” es un espacio común muy chico por donde los habitantes de los edificios trasuntan sus rutinas durante todo el día y un paso obligado para no bordear toda la manzana. Tiene un seudo arenero y algunas hamacas rotas. También unos troncos donde no se sienta cualquiera. Los edificios están inmersos en una decrepitud y abandono que los convierten en una rara postal en una Villa Riachuelo con casas de clase media y la muy comercial calle Chilavert.
En las torres, los Fuentes son señalados por varios vecinos como malandras de tiempo completo. La estrechez del su feudo les favorece un férreo control “policial” sobre los vecinos. Y son estos vecinos los que los acusan muy duramente de todo pecado posible. Señalan un hecho no casual: -venden merca a lo loco; o sea que plata no les falta, pero para hacerse los dueños del medio, además le piden plata a los vecinos para dejarlos pasar.
Los testigos dan la cara por la bronca acumulada. Dan nombre, apellido y hasta su número de documento a este cronista. Hoy han perdido el miedo de la mano del hastío producto del abuso sistemático de esta familia, -afirman-. También señalan al padre de los Fuentes, preso hace rato por narcotráfico. No es casual. Ellos sostienen que los hermanos Fuentes se han hecho capangas de las torres por portación de apellido y levantan la bandera de la eterna amenaza; “cuando salga mi viejo”. Así han conformado un reino de terror y de invulnerabilidad, sumándole a sus delitos la portación de estirpe. Son sus vecinos sublevados los que detallan los “domicilios” alternativos de los Fuentes. Hablan de casas y aguantaderos en Villegas, 9 de Julio y Bahía Blanca.
Los hermanos Gustavo Ariel Fuentes, Juanchi Fuentes y el Kikii Fuentes, a los que se sumó Lucas (a) el campesino, pusieron fin a la discusión con Benítez, clavándole un destornillador en la sien. En una ironía cruel, un anciano vecino, furioso señala: -La única vez en su vida que agarran una herramienta es para matar a alguien.
Julito era un grandote buenazo. Pintor conocido en el barrio y buen laburante. A Julio lo habrá traicionado la confianza. Habrá creído que para lidiar con ellos le bastaría su presencia física, y, tal vez llegado el caso, esa furia que a veces cargan los mansos. No le alcanzó: los Fuentes se hicieron tiempo para subir a buscar el arma mortal y dos de ellos lo atacaron por la espalda cuando discutía con los restantes. Así nomás le arrancaron la vida.
La reyerta comenzó cuando Benítez decidió poner fin a una vieja pelea en la que se involucró para salir a defender a una prima. Para los Fuentes, -a decir de los vecinos-, esta fue una buena excusa para sacarse del medio al único vecino que les hacía frente. Sí: Benítez con treinta y largos años estaba harto y venía enfrentándolos a menudo, a pesar de no ser un “guachín de fierro”. Todo lo contrario dice Norma: -era un pibe resano.
El viernes a las 4 de la mañana Benítez comenzó su agonía. Quedó tirado en el cemento mugriento con el destornillador enterrado. La ambulancia tardó una hora según los testigos, por lo que lo llevaron en camioneta al hospital. Lo operaron el sábado, y murió hoy.
El Kikii posee página en FACEBOOK: http://www.facebook.com/Elkiikiidelmck?sk=info Allí ellos se autonominan los dueños de Lugano. Se lo puede ver exhibiendo un arma e ilustrando a sus acólitos sobre el uso que piensa le dará. Su facebook es una buena pieza para ayudar en la investigación. Allí las fuerzas de seguridad podrán interrogar a los cuarenta (más o menos) amigos del Kikii que muestran su alegría por la flamante adquisición.
Los gendarmes moradores hoy de la vieja 52 no quisieron tomarles la denuncia a los vecinos. ¿Porque son pobres? Para nada. Los gendarmes vaya uno a saber porque no toman muchas denuncias. De mayor y menor calibre. Acusan “problemas con los procedimientos”. Habrá que revisar todo.
Los vecinos de los monobloques, irrumpieron por la fuerza en el departamento de los Fuentes, en el “C” del 1° piso de la torre “1”. Nadie se llevó nada. Pero todo lo que encontraban a su paso volaba por la ventana. Luego se trasladaron a avda Francisco Fernández de la Cruz y José León Suárez, frente a la parroquia del Santo Cristo y comenzaron a cortar la calle. Queman gomas y demandan por los medios masivos: ninguno aparece.
Aseguran que van a permanecer “hasta que se haga justicia”.
Los hermanos Fuentes y “el campesino” están desaparecidos desde el viernes.
¿Se hará justicia?
Nota: VÍCTOR JOSÉ DEL VENTO
Video y Fotos: PATRICIO CARCANI