El 30% de los locales que se clausuran en la ciudad de Buenos Aires viola esa medida y reabre sin consentimiento formal. Según indica un relevamiento realizado por la Agencia Gubernamental de Control (AGC), en 2011, de 3240 fajas de clausura se registraron 915 violaciones.
«Si se violan las clausuras será en respuesta a los modos de inspección obsoletos que no contribuyen a que la gente desarrolle su actividad comercial», sintetizó ofuscado Mariano Madueña, miembro de la Cámara Argentina de Pubs, Bares y Afines. Ese rubro de locales es de hecho el que registra mayor cantidad de clausuras (816) y también de violaciones de éstas (318).
Sin embargo, fuentes cercanas a esa área admitieron que el accionar de la justicia contravencional es, al menos, «perezoso». Esta prueba empírica funciona como incentivo para violar las clausuras, pues «los dueños de los comercios saben que pasarán meses hasta que los cite la Justicia».
Lejos de ser la única causa por la que se violan las clausuras, tanto comerciantes como funcionarios de la AGC admiten que las normas son obsoletas y que muchas exigencias son imposibles de instrumentar.
Existe un coeficiente ocupacional en los pubs que determina que debe haber una persona por cada 3 metros cuadrados, «una locura», esgrime Madueña. «Eso significa que si tengo un local de 150 metros cuadrados puedo meter sólo cincuenta personas. O sea, tengo que tener un local para ricos y cobrar precios excesivos. O te fundís con la ley actual o no trabajás con la capacidad legal actual. Imaginá lo que tenemos que facturar para llegar a pagar alquileres que van de los $ 6000 a los $ 12.000«, detalló a LA NACION Madueña, dueño del bar Guebara de San Telmo.
Así, fuentes de la AGC admitieron que «la ley es obsoleta, está desactualizada y en la actualidad es imposible cumplirla». Es decir que cuando se realizan las inspecciones el coeficiente ocupacional no es controlado con rigurosidad y lo que se observa es «que no se exceda la capacidad de forma grosera y que haya comodidad para circular en caso de siniestros».
Según informaron desde la Cámara Argentina de Pubs, Bares y Afines, la mayor cantidad de clausuras en pubs se debe a que dentro de los locales hay más personas que la capacidad permitida. «Pero de las clausuras el 95% son absueltas o porque están mal realizadas o porque los jueces consideran impracticable la exigencia legal», aseveró Madueña.
El segundo rubro en el ranking de clausuras son las obras en construcción, con 795 el año pasado, seguido por los quioscos, con 524 clausuras. Estos últimos son clausurados mayormente por vender alcohol a menores. Por último, en 2011 se clausuraron 418 talleres textiles clandestinos.
Curiosamente, en la lista de locales que violan las clausuras impuestas por la AGC no se mantienen los mismos puestos. De hecho, las obras en construcción aparecen en último lugar de las que violan las clausuras y segunda en las que son clausuradas. El primer puesto es ocupado por los pubs y bares (318), seguidos de 267 quioscos y por 184 talleres. De las 795 obras en construcción clausuradas se violaron el año pasado 107.
Lo que se esconde detrás de los números, coinciden funcionarios y vecinos, es la falta de conciencia sobre las normas básicas de seguridad. «Podemos controlar y poner la faja de clausura, pero si la arrancan y deciden seguir en infracción ya no podemos hacer nada», explicaron fuentes de la AGC. En lo que va del año se clausuraron más de 70 locales y en inspecciones realizadas en un fin de semana, de 93 comercios se constataron 12 violaciones.
Video de clausura de un local con cucarachas (gentileza América Noticias): http://www.youtube.com/watch?v=iUKTdt_rWlk&list=UUHzGo1fD-fU89MR8ZtCewrQ&index=7&feature=plcp
Por Julieta Molina de La Nación