por Víctor José Del Vento
Indudable es que el tiro le salió por la culata al Gobierno porteño, al presentar ayer el pésimo (por los resultados) y controversial (para los Gremios) informe PISA (sobre evaluación de alumnos), ya que pensaba que podría exhibir, una educación superior a “sus competidores” del Gobierno nacional.
El alumnado porteño sumó 418 puntos en Matemática, 429 en Lengua y 425 en Ciencia. En las siempre difíciles matemáticas, se elevaron 30 puntos por encima del promedio nacional, pero en otra de las pruebas tomadas por el gobierno, este pedía la explicación de la regla de tres simple. Grande fue la sorpresa y la desazón, cuando el 77% de los alumnos no logró responder bien, y mucho peor porque de esta prueba participaron también los docentes, pero el 65% no pudo hacerlo.
El informe PISA sobre calidad educativa es por demás polémico y hay razones tanto en quienes lo defienden y sostienen como en quienes lo atacan (los antimacristas, los gremios docentes, etc.) En esta ocasión, el gobierno porteño pidió el informe a la OCDE, (la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico que coordina el estudio), con la clara fundamentación política de un Macri que como aspirante presidencial, necesita imperiosamente despegar del manifiesto deterioro educativo nacional de lo que ya muchos denominan la «Década Embrutecida».
El intento frustrado fue por demás ambicioso, porque en esta oportunidad el Gobierno porteño aumentó considerablemente la participación en números reales, ya que de las 12 escuelas iniciales pasó a 60 establecimientos públicos y privados.
El punto flojo llegó de la mano del Gobierno porteño, quién decidió realizar una prueba propia y preguntó a alumnos y maestros si sabían explicar la regla de tres simple: el 77% no lo supo, pese a haber pasado de año y lo de los docentes fue sencillamente espantoso: el 65% no pudo explicar la regla de tres simples.
En agosto de 2012 ya el ministro de Educación porteño Esteban Bullrich había adelantado este examen: “Como hemos evaluado a los docentes vemos que hay en ellos un problema de formación que hay que fortalecer. Este año hemos puesto capacitación obligatoria. Saben la regla de tres simple pero no saben cómo aplicarla”. “Los docentes están siendo evaluados para ver si están aptos para dar clases a los más jóvenes”, agregó Bullrich.
La prueba de la regla de tres simple, demuestra además, la inconsistencia de la encarnizada lucha política (las más de las veces) que sostienen con el macrismo (que hace lo propio). Cierto es que el macrismo no es devoto de la educación pública y que invierte más en subsidios a los privados que a los propios, pero hoy toda lucha opositora debe ser urgentemente revisitada. La “igualdad” gremial, permite la coexistencia de todo tipo de docentes, y mientras los hay que honran lejos la profesión, -y saben la regla de tres simples-, hay una parva, entre los que se mezclan; impresentables, incapaces, enfermos de verdad y de los otros, etc., etc., que solo se sostienen por la férrea defensa sectorial y nada más, pero que hasta sus colegas aborrecen por su escaso -o inexistente- interés o compromiso.
La otra pata de esta mesa descuajeringada son los padres, que en la última década erraron el vizcachaso y en lugar de darle de vez en cuando una buena patada en el tujes a sus hijos cuando lo merecen, se llegan hasta las escuelas para crucificar a los maestros como castigo por las malas notas a sus vástagos. Así los maestros se encuentran de pie frente a una horda salvaje como si estuviesen enseñando en “la 12 xeneixe”. Imposible, ¿cierto?
Lo cierto es que hoy los alumnos no saben la regla de tres simple y poco se puede esperar de una generación mal educada sin maestros capacitados y bien dispuestos a la hora de transmitir lo aprendido.
RESULTADOS PISA: SILEONI CONFIRMA LA «DÉCADA EMBRUTECIDA»
La Argentina cada vez se hunde más en el fondo del ranking de evaluación de alumnos que realiza a nivel mundial la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
Tras conocerse los resultados correspondientes a 2012, la Argentina cayó 1 puesto, hasta el N°59, de un total de 65 estados auditados.
Al mismo tiempo se ubica por debajo de países vecinos como Brasil, Chile, México y Uruguay. El ministro de Educación, Alberto Sileoni, que este martes 03/12 brindará una conferencia de prensa, justificó los malos resultados en que «A todos los países americanos no les fue bien».