un discapacitado grabó el maltrato de un empleado de un peaje
PONGAN PEAJE AL MALTRATO
Un actor discapacitado grabó con una cámara oculta el maltrato de un empleado de Autopistas del Sol en el peaje del ramal Campana. Cuando intentó pasar sin pagar con la credencial de discapacidad, lo trató de “lacra” y “rata”. Intervino el Inadi.
Un video subido a Facebook por José Luis Olivier, un actor discapacitado, muestra una escena en la que es maltratado por el empleado del peaje del ramal Campana de la Panamericana en dirección a Buenos Aires, por intentar pasar sin pagar mostrando un carnet de discapacidad. El empleado lo trató de “lacra” y “rata”. Ahora se dispone a hacer una presentación ante la Justicia. Más tarde, la empresa Autopistas del Sol salió a pedir disculpas por el maltrato, pero aclaró que los discapacitados no están exentos de pagar salvo en las autopistas de la Ciudad. El Inadi denunció la discriminación.
–Hola, buen día –dice Olivier, mientras estira su brazo por la ventanilla y muestra su credencial al empleado del peaje.
–Tenés que abonar, hermano –dice el empleado.
–No, es una ley nacional –devuelve Olivier.
–Es una autopista privada esto –asegura el empleado con una particular noción de lo privado, mientras con la cabeza hace un gesto más moral que de negación.
–Territorio argentino, territorio argentino –insiste el conductor.
–¿Cómo?
–Territorio argentino.
–Esto es privado, tenés que abonar. Si no, puede ir por colectora.
–No, es una ley nacional –insiste Olivier.
–Yo por las dudas voy a tomarle la patente –dice el empleado, temiendo quizás alguna reacción desconocida, y se levanta de la banqueta, se asoma y toma nota.
–Dale –le dice el conductor.
–Son unas lacras –dice el empleado, después de anotar a mano la patente sin mirar directamente hacia el conductor sino hacia el frente.
Cuando Olivier le pide que repita el insulto, el empleado responde preguntando “¿qué?” y “¿qué te importa?”. Lo mismo cuando le pide que se identifique. “¿No te importa? Decilo a la cámara”, revela Olivier mientras le señala el grabador. El empleado mira a la cámara y en lugar de amilanarse responde: “¿Sí? Se lo digo a la cámara; decile a la cámara también que estás muy equivocado”.
–¿Sí? ¿De qué? ¿De qué estoy equivocado?
–De que tenés que pagar.
–¿Sí?
–Sí, tenés que pagar.
–Ley nacional, discapacitado.
–Acá no rige la ley nacional, maestro, es una autopista privada –vuelve el empleado. Se ve que levanta igual la barrera y Olivier inicia la marcha.
–Chau –saluda Olivier.
–Chau, rata –suelta el empleado.
El caso ocurrió el lunes 21, pero recién fue conocido ayer, cuando Olivier lo subió a Facebook. La empresa Autopistas del Sol, mediante un comunicado, expresó “sus disculpas ante la situación vivida por el Sr. Juan Oliver al intentar trasponer una estación de peaje sin abonar y presentando una acreditación de discapacidad”, sostuvo que tomará las medidas que corresponda con el empleado, pero agregó que en el contrato de concesión la discapacidad no figura entre las opciones de exención, como sí ocurre en autopistas porteñas. Finalmente, el Inadi sostuvo que “si bien es cierto que legalmente la exención de la obligación del pago del peaje no se aplica en rutas nacionales –como lo es la Ruta Nacional 9 (Panamericana)–, nada legitima ni justifica el maltrato del que fue víctima Olivier”, dijo el organismo.
Lo cierto es que este tipo de discusiones no deberían existir si el estado no privilegiase a las empresas como en el caso de los discapacitados que deben representar el 0,00001 % de los automovilistas que usan las autopistas.