DIPUTADO QUIERE CAMBIAR EL NOMBRE DEL PUENTE ALSINA

se llamaría “Ezequiel Demonty” en memoria del joven asesinado en 2002

PUENTE DEMONTY

Como un homenaje a la memoria del joven asesinado por Policías de la Comisaría 34, el diputado Leonardo Grosso empujó el proyecto que ahora tiene ya dictamen de la Comisión de Transporte y de no surgir oposiciones en su próximo paso al Senado, será su nuevo nombre. Ya surgen voces de oposición al bautizo.

por Víctor Del Vento

El proyecto fue impulsado por el bloque del Frente para la Victoria y se trató con apoyo de la UCR, de Libres del Sur y del GEN y ya obtuvo dictamen favorable de la Comisión de Transporte para que el mítico Puente Alsina se conozca de ahora en más como Puente “Ezequiel Demonty”, en homenaje al adolescente asesinado por la Policía al ser arrojado al Riachuelo en 2002.

Al respecto, Carlos Pisoni, Subsecretario de Derechos Humanos de la Nación, expresó: -“que por gatillo fácil, por casos de violencia institucional, por represión policial pero sobre todo la iniciativa es para recordar la memoria de Ezequiel”, y destacó que “en los últimos años hemos dado una gran lucha cultural, una batalla semántica incluso”.

La diputada nacional María Luz Alonso (FPV-La Pampa) explicó los motivos por los cuales su bancada respalda la iniciativa; en tanto la madre de Demonty, Dolores Sigampa, expresó: “Es un honor que el puente lleve el nombre de mi hijo porque es un homenaje al nombre de todos los chicos de la zona sur, que han sido víctimas de abusos institucionales”.

LA HISTORIA DE EZEQUIEL DEMONTY

Demonty volvía a su casa, después de haber pasado la noche en la bailanta Panambí, de Constitución, junto a sus dos amigos y una chica llamada Gloria. Pero en el trayecto fueron interceptados por tres patrulleros de la Policía Federal, de los que descendieron varios policías y comenzaron a increparlos. A Gloria la dejaron ir porque dijo que estaba embarazada, pero a los tres jóvenes los obligaron a subir a los patrulleros y los llevaron frente al Puente Alsina. Allí los golpearon hasta cansarse, y los obligaron a meterse al Riachuelo y alejarse de la orilla.

Demonty fue encontrado durante un rastrillaje fluvial realizado por buzos tácticos de Prefectura Naval, en cercanías del puente Vélez Sarsfield, a unos 1.500 metros de donde había sido obligado a internarse.

La autopsia realizada sobre el cuerpo de Ezequiel Demonty demostró que su muerte se debió a la asfixia por inmersión, pero dos causas confluyeron para que no sobreviviera: no sabía nadar, y minutos antes había sido golpeado salvajemente por los policías, al igual que los dos amigos que lo acompañaban. Julio Ismael Paz logró cruzar hasta la otra orilla; Claudio, con catorce años, se aferró a una rama y se escondió entre los juncos.

Paz fue asesinado siete años después en Ciudad Oculta, donde apareció en el interior de un auto, en posición fetal y con tres tiros en la cabeza. Claudio, estuvo preso al menos dos años, entre 2008 y 2010, sin condena firme y por un delito menor, pero su historia nunca más fue contada.

El efectivo que obligó a los tres jóvenes a internarse en las aguas del Riachuelo fue identificado por otro policía. El sargento 1° Luis Funes – confesó ante la Justicia- que el oficial subinpector Javier Samohano fue el que decidió llevar a los jóvenes hacia un puente y tirarlos al Riachuelo.

El hallazgo se produjo apenas horas después de que el fiscal de instrucción en lo criminal porteño, Marcelo Roma, solicitara a la juez María Cristina Bértola la detención e indagatorias de doce policías de la comisaría 34 por su presunta responsabilidad en la desaparición del joven, a partir de la declaración de uno de ellos que se quebró durante su testimonio. Actualmente, hay 9 policías
presos, acusados de «privación de la libertad seguida de muerte».

EL asesino fue el subinspector Gastón Somohano, hijo de un oficial superior retirado de la Policía bonaerense, el oficial inspector Daniel Barrionuevo, los cabos primeros Luis Gutierrez y José Luis Martinez, el sargento Jorge Sosa, el sargento primero Luis Funes y los agentes Maximiliano Pata, Jorge Solís y Sandro Granados (todos de la comisaría 34) . Actualmente ocho estan en Marcos Paz y uno en Gendarmería.

Los testigos de entonces fueron los dos menores que estaban con él, una chica que fue dejada en libertad, una vecina de una esquina que vio como se producía y otra vecina que vio desde la terraza el lugar donde ellos fueron tirados, más las declaraciones de ellos mismos cuando fueron indagados y comenzaron a incriminarse unos a otros para poder evadir responsabilidad.¨

OPOSICIÓN AL CAMBIO

Descartando de plano toda razón que tenga que ver con el homenaje a la memoria de Ezequiel, sin duda los primeros vecinos en enterarse, consultados por Noticiario Sur, demostraron su clara oposición por el cambio. Norma, -vecina de Pompeya-, señaló: -me parece mal. Este es y será Puente Alsina. Al chico que le rindan un homenaje pero no desvistiendo un santo para vestir a otro. Pepe, otro vecino, declaró con fastidio: -Porqué no se dejan de embromar. De pibe cuando había que llamarlo Uriburu, los vecinos nos resistíamos y ahora esto. Siempre fué y será Puente Alsina. Que hagan leyes útiles y que no jodan con lo que está bien. Carlos ironizó: -Habrá que cambiar nomás la letra de todos los tangos o los cantores tendrán que explicar al terminar la canción cual era y donde estaba Puente Alsina. Lo mismo con las letras de los tangos escritas, tendrán que venir con un diccionario.

De aprobarse este proyecto, y teniendo en cuenta que luego debe pasar por el Senado, el puente que une el barrio porteño de Pompeya con la ciudad de Valentín Alsina –partido de Lanús- dejará de llamarse Alsina para recibir el nombre de Demonty.

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