POMPEYA: CLAUSURAN PROSTÍBULO QUE FIGURABA COMO TEATRO

Un local nocturno de Pompeya (Buenos Aires) fue clausurado porque aunque había pedido que lo habilitaran como «teatro independiente» en realidad funcionaba como un prostíbulo.

¡NO SOMOS PUTAS, SOMOS ACTRICES!

Así lo informó la Agencia Gubernamental de Control, que tras una inspección no sólo cerró el establecimiento sino que también le revocó el trámite de habilitación por desvirtuación de rubro.

Pero no es la primera vez que este local es clausurado, porque en los últimos 25 años funcionó varias veces como prostíbulo, gracias a la connivencia policial (32° y 34°)

El operativo se realizó hace dos semanas en el local que funcionaba en avenida Sáenz 876, que tiene dos pisos y suma 187 metros cuadrados. Según el acta de la Dirección General de Habilitaciones y Permisos, el 18 de setiembre del año pasado una persona de nombre Juan Manuel Ramos había solicitado que le dieran una habilitación para abrir un comercio bajo la figura de «teatro independiente, café, bar, despacho de bebidas, whiskería y cervecería», tal como contempla el Código de Habilitaciones porteño, y que permite empezar a trabajar con el inicio del trámite.

Pero semanas después, en una inspección de la AGC, la Policía Metropolitana y otros organismos se encontraron con que en el lugar funcionaba lo que se conoce como «local Clase A», que es la figura legal que utilizan los cabarets. De hecho, los inspectores constataron «la presencia de alternadoras trabajando a porcentaje de consumición», lo que habitualmente se conoce como coperas.

Además de haber detectado que ofrecía prostitutas, en el local faltaban matafuegos, había cucarachas y no tenía en exhibición el plano de evacuación, otros de los requisitos formales que incumplian.

La desvirtuación de rubro es uno de los recursos que más habitualmente utilizan los dueños de cabarets o prostíbulos para simular una actividad legal. De hecho en muchos casos los habilitaban como «local Clase C», la figura normativa que incluye a las discotecas comunes.

En los últimos años la AGC clausuró casi 150 boliches donde se ejerce la prostitución y el proxenetismo, tanto locales a la calle tipo como departamentos privados. Algunos de ellos bastante famosos, como Madaho’s y Black, dos clásicos cabarets de Recoleta. En general, la mayoría de los lugares inspeccionados estaban en Flores, Retiro, Constitución, Once, Recoleta y Palermo. También clausuraron un cabaret en Once que pertenecía a Rafael Levy, ex dueño de Cromañón.

En algunos casos, además de trata de personas detectaron venta de drogas.

Salir de la versión móvil