Está claro que al ciudadano le gusta ver que la gestión se activa. Que el aporte de los impuestos se refleje en alguna de las acciones postergadas y fundamentalmente que evite accidentes futuros. Y ahí empieza la historia. Hay quienes creen la gestión se mide por las grandes obra, y los hay quienes entienden que suman mucho los pequeños detalles: cuidar el banco de la plaza, recortar el césped de los bulevares y otras tantas que sería imposible detallarlas.
Una de esa está a la vista, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad inició los trabajos de pintura para demarcar los sumideros, y así evitar que se estacione en esas zonas y poder prevenir anegamientos los días de lluvia.
Así lo explicó el ministro Eduardo Macchiavelli: “Queremos una Ciudad limpia y eso implica mantener el espacio público en buenas condiciones. En un plazo de dos años pintaremos el total de los 29.226 sumideros que hay en la ciudad, para concientizar sobre la importancia de la limpieza del sistema pluvial”.
La pintura empezó por las avenidas Rivadavia, Independencia, San Juan, Belgrano, Díaz Vélez y Corrientes, hasta completar toda la Ciudad. Se trabajarán 30 sumideros por día hábil.
Tal vez la duda surja en parte de las palabras que expresa el ministro, ¿Cuántos metros menos quedarán liberados para el estacionamiento? Porque sumando los espacios de los sumideros, la ampliación de los lugares donde se colocan los contenedores de basura, la extensión de las ochavas con las rampas para discapacitados y las bicisendas.
Tomemos en cuenta que el transporte público no es de la mejor calidad y que los valores del estacionamiento medido (exceptuando las propuestas de futuros parquímetros) tiene elevado valor y sube casi al ritmo del aumento de tarifas.
Es real que las violentas lluvias han dejado en varias oportunidades a la Ciudad en condiciones lamentables, pero el equilibrio de estas medidas debería ser tomado en cuenta a la hora de ver lo difícil de encontrar estacionamiento, más allá de las horas pico.
Plan de mantenimiento de los sumideros de la Ciudad.
La limpieza del interior de los sumideros se realiza todos los meses en forma sistemática y programada con camiones desobstructores. Los planes de mantenimiento y ruteos de limpieza están prefijados. Ante alerta meteorológica, se repasan los sumideros de las zonas potencialmente anegables.