El presidente de los Estados Unidos justificó el lanzamiento de los misiles contra una base aérea siria y le pidió “a todas las naciones civilizadas” a buscar el fin del “derramamiento de sangre”.
“El martes el dictador sirio Bachar Al Asad lanzó un horrible ataque químico contra civiles inocentes. Usando un agente nervioso mortal, Assad ahogó las vidas de hombres, mujeres y niños indefensos. Fue una muerte lenta y brutal para muchos, incluso para bebés preciosos, en este bárbaro ataque”, subrayó el mandatario.