Las principales ciudades de Brasil fueron los escenarios para reclamar la salida del mandatario, a quien se lo involucra en un escándalo de corrupción.
Mientras tanto, el mandatario brasileño se reunión con aliados y ministros en el Palacio de Alvorada y reiteró que dará un paso al costado, pese al audio que se filtró en el que se lo relaciona con un caso de corrupción.