El Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad de Buenos Aires está llevando adelante una campaña para evitar que los vecinos tiren sus chicles en la vía pública. “Con esta campaña queremos que los vecinos tomen conciencia y tiren los chicles en los cestos. No solo ensucian las veredas, también es molesto para todos los que hemos pisado un chicle. Con un poquito de esfuerzo de todos podemos tener una ciudad más limpia y linda”, sostuvo Eduardo Macchiavelli, titular de la cartera.
La campaña se inició luego de que se removieran 90 mil chicles pegados de la calle Florida, con una tecnología innovadora, eficiente, versátil: la limpieza criogénica. Además habrá eventos musicales y entrega de volantes.
Según las estadísticas, en el mundo se consumen anualmente 250 toneladas de chicles y más del 80% es desechado en la vía pública. Por su composición, el chicle, altísimo nivel de adhesión a las superficies. Además de generar suciedad, los chicles constituyen un foco de infección.
Menos chicles pegados
