En pleno debate por el nuevo Código de Planeamiento urbano, la legisladora de la Ciudad de Buenos Aires, Inés Gorbea (Suma+), afirmó que este proyecto, impulsado por el Ejecutivo porteño, es muy “denso por su contenido”, teniendo cuenta su extensión y los tecnicismo que plantea. Por eso, consideró que debe tratarse con “mucho cuidado” y a “conciencia”, por los cambios estructurales para el distrito capitalino.
En este sentido, marcó que debe evitarse que se trabaje rápidamente en el Parlamento, ya que define la Ciudad para los próximos años y además todos los bloques tendrán aportes “valiosos” a medida que avance su discusión.
Respecto a los puntos más visibles de las modificaciones, señaló que se saca el FOT (Factor de Ocupación del Terreno), que delimita cuánto puede ocupar la edificación en la parcela, y limita la altura máxima en áreas de desarrollo, donde se va a autorizar torres al estilo de Puerto Madero.
A su vez, reforma el criterio por manzana: “Implica que se pueden construir edificios que superen los límites de altura establecidos en el Código, siempre y cuando en la manzana ya haya un edificio de esa altura”.
La Diputada planteó que debe resolver algunas problemáticas para acercarse a un ideal de ciudad. Entre esos puntos aparece el estancamiento demográfico, incremento de asentamientos informales, acceso a la vivienda, inmuebles ociosas, diferencia poblacional entre zonas y comunicación con el transporte.