El último jueves en la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires aprobó una ley para que los jubilados y pensionados de la CABA tengan exenciones del 100%, 80% y 40 % en los pagos de aranceles para la renovación de la licencia de conducir. Además, propuso la creación de tarifas con descuentos para ancianos que cuenten con más ingresos.Con la iniciativa fue presentada por el diputado Diego García Vilas, en coautoría con los legisladores Sol Méndez, Gastón Blanchetiere y Natalia Fidel (Confianza Pública- Vamos Juntos), se pretende aportar una herramienta más para garantizarles la igualdad de oportunidades y una mejor calidad de vida.
Según la norma, todos los que perciban haberes equivalentes a no más de dos jubilaciones mínimas quedarán totalmente eximidos del pago del trámite. En tanto, quienes perciban un monto mayor pagarán solo el 20% del arancel (si tienen 70 años o más) o el 60% (si tienen entre 60 y 69 años de edad). Otro de los objetivos de la ley es universalizar y simplificar acceso a estos beneficios, tomando como única variable el nivel de ingresos evitando que los adultos mayores tengan que tramitar exenciones por correo electrónico o a través de portales o de manera personal.
Se estima que los adultos mayores representan alrededor del 20% de la población, alcanzando la cifra de 650.000.
Es importante mencionar que actualmente la renovación de las licencias tiene un costo de $750, y a esto debemos sumarle el Certificado Nacional de Antecedentes de Tránsito (CENAT) cuyo valor es de 180.