En clave con el crecimiento que viene teniendo en el espacio de la Coalición Cívica-ARI (tras la ida de Elisa Carrió se convirtió en el presidente del bloque en la Legislatura porteña y vicepresidente del bloque Vamos Juntos), finalmente Maximiliano Ferraro se convirtió en el presidente del partido a nivel nacional.
En un contexto en el que hay una batalla implícita entre Carrió y el actual presidente de la nación Mauricio Macri, el incipiente líder de la fuerza fue elegido en un congreso federal partidario realizado en Ezeiza: «El país está pasando malos momentos, pero hay que acompañar a nuestros compatriotas que hoy no la están pasando bien», esgrimió el político de 42 años.
Ferraro, quien en la legislatura porteña se desempeña como presidente de la Comisión de Educación, estuvo durante estos meses en el ojo de la tormenta por el tratamiento y posterior aprobación de la Universidad de la Ciudad de Buenos Aires, más conocida como UniCABA, ya que fue uno de los legisladores más férreos en defender un proyecto para el que una mayoría del ámbito académico representará el cierre de los 29 institutos de formación docente (IFD) desparramados por toda la ciudad.
Además, se refirió al estado actual de la relación entre los partidos que integran la alianza de gobierno: «Nosotros nos sumamos para enfrentar a la corrupción y el autoritarismo, Cambiemos debe ser el cambio cultural por el que votaron millones de personas», argumentó, y concluyó su discurso enviándoles un mensaje a sus compañeros, criticando las metodologías que en algún momento tanto rédito le dieron al admitir que «no se puede gobernar mirando encuestas». Habrá que ver si le terminan haciendo caso.