Sacan a los CAF 5000 de circulación

Se decidió la compra de los coches CAF 5000 en enero de 2011, cuando Mauricio Macri era el jefe de gobierno porteño, pero hubo varios intentos desde 1985. Finalmente se adquirió una flota de 36 unidades, cada coche tuvo un costo de US$550.000, para sumar casi US$20 millones y hoy  la misma yace en el depósito Magaldi, de Barracas, como chatarra ferroviaria.

Resulta que el año pasado desde Madrid llegaron pésimas noticias: un mecánico de los talleres de la red del metro, que limpiaba los disruptores, una de las piezas de los trenes que contenían amianto, murió. Luego se conoció el caso de una nueva víctima, el primer trabajador de la compañía española en ser diagnosticado con asbestosis, un cáncer pulmonar causado por la inhalación de polvo de asbesto, presente en las fibras del amianto y este año falleció un jubilado del metro por la misma causa. Todos ellos habían trabajado en los coches CAF 5000.

Aquí, en diciembre de 2018, la empresa estatal Subterráneos de Buenos Aires (Sbase) reconoció la presencia de piezas con amianto en las formaciones españolas y los trabajadores entraron en alerta. 160 mecánicos de la B se sometieron a estudios para descartar si habían sido afectados por el temible material. Los resultados se esperan para los próximos días.

El asbesto es un material poco perceptible, en forma de partículas en el aire. Si se respira a diario puede afectar el aparato respiratorio, llegando a tapar los pulmones, y hasta puede provocar cáncer.

La situación planteada por la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y del Premetro (Agtsyp) podría ser más grave porque, según análisis realizados en la Universidad Nacional del Sur en (UNS) Bahía Blanca, el material sigue apareciendo en piezas de otras flotas, como los coches Mitsubishi.

Si la Comisión de Asbesto, creada en diciembre pasado, confirma los resultados obtenidos por la UNS, otros 280 trabajadores, en su mayoría maquinistas y guardas, exigirán estudios médicos para tener garantías sobre su estado de salud.

Según los metrodelegados, de las 24 formaciones que deberían circular en la B para garantizar el servicio solamente 17 siguen operativas. Y advierten que si otros dos trenes tienen desperfectos en algunas de las piezas con amianto no se repararán y ocuparán más espacios en las cocheras y talleres, por lo que el servicio quedaría bloqueado.

Salir de la versión móvil