Tras el despegue de urbanización de la Villa 31, con el traslado del Ministerio de Educación, la confirmación de nuevos locales de grandes empresas y la construcción de nuevos edificios en el sector del barrio Padre Mugica, ahora será el turno de renovar uno de los espacios más abandonados de la zona: la termina de ómnibus de Retiro.
Es que tras dos intentos frustrados, ahora se licitó la renovación del edificio inaugurado en 1983 y se conocieron las dos empresas que se presentaron para refaccionar la terminal por la que pasan alrededor de 50 mil personas por día en temporada alta.
Por un lado, se presentó Terminales Terrestres Argentinas S.A (TTA S.A.), a cargo de Nestor Otero, que construyó la terminal Dellepiane, en la cual, dos años después de su fundación, prácticamente no tiene servicios. La propuesta pasa por construir un nuevo espacio público de cinco hectáreas en el entorno de la terminal, un nuevo acceso bajo nivel para el ingreso y egreso de micros y mejorar la circulación, como así también la construcción de un hotel de 100 habitaciones y de un edificio de oficinas y coworking.
Mientras que Neuss Capital, quien también presentó su propio proyecto, estipula revalorizar la terminal «con nuevo atrio urbano de ingreso», un shopping en las inmedicaciones y un espacio de coworking pero dentro de la propia estación.
Ahora habrá que esperar a que ambas propuestas sean sometidas a un proceso de evaluación que concluirá con la adjudicación en octubre, con un costo estimado de inversión de 1.000 millones de pesos y tendrá un plazo para finalizar las obras de 20 meses, para luego explotarla comercialmente durante los próximos 35 años.