El futuro de la economía es de total incertidumbre: Alberto Fernández todavía no termina de definir su gabinete pese a los rumores como así tampoco ofrece definiciones concretas sobre cuales serán los principales lineamientos. Sin embargo, ayer el presidente electo adelantó que no aceptará el desembolso restante del Fondo Monetario Internacional, unos 11 mil millones de dólares. ¿Qué implica para el desarrollo económico de la futura gestión?
«Empiezan a vencer recién en el tercer año de la próxima presidecia, en los primeros dos no hay deuda con el fondo, pero te estás quedando sin financiamiento por la situación financiera», complementó, vaticinando una situación conflictiva ante la falta de financiamiento externo.
Por otro lado, el economista advirtió que otro problema será la reactivación del consumo, y que para poder comenzar a solucionarlo primero deberán tomar decisiones sobre otros aspectos: «Venimos de una crisis de la balanza de pagos, impactó de lleno en la actividad: la gente pospuso el consumo y las empresas las decisiones de inversión; para convencer a la gente de que no habrá crisis hace falta anclar expectativas, necesitamos el anuncio de un esquema sobre cuales serán las medidas que se van a ejecutar y que sean alrededor de la deuda, la agenda fiscal y la política monetaria», remarcó Camaño.
Por último, el especialista criticó la postura de ambos gobiernos, el saliente y el entrante, sobre la transición, en la que las dos fuerzas habían amagado a comenzar a trabajar juntos y más tarde la comunicación se terminó cortando. «Había una oportunidad de hacer una transición ordenada y se desaprovecha: no sirve esconder las decisiones porque el mercado te va a anticipar igual», concluyó.