El juez que entiende la causa, Fabian Lorenzini, rechazó la propuesta del gobernador de Santa Fe, pero envió las denuncias penales que pesan sobre el directorio, a la fiscalía provincial, para que de curso a la investigación.
Por el momento la empresa seguirá siendo controlada por los mismos directores, sin la intervención judicial propuesta por el gobernador Perotti. Pero los delitos penales denunciados por la Inspección de Justicia Provincial deberán ser investigados por la Fiscalía.
Esa decisión significa, en la práctica, que la causa principal, el concurso de acreedores, sigue su camino independientemente de la causa suplementaria, surgida de la apelación presentada por la Inspección General de Personas Jurídicas de Santa Fe.
En la misma dirección, un comité de Bancos externos, acreedores de la firma agroindustrial Vicentín, llevan adelante el “Discovery Process” en los tribunales de EEUU por una deuda de u$s500 millones, que la empresa tomó con entidades financieras del exterior.
Mientras tanto, otras entidades de crédito externas están evaluando una acción judicial contra los dueños de Vicentín que, al día de hoy suma una deuda total de u$s1.300 millones. La acción judicial prevista por los Bancos es por desvío de fondos.