Ante la propagación del Coronavirus a nivel mundial, la Universidad de Oxford comenzó sus estudios para desarrollar una vacuna: ChAdOx1 nCoV-19. En esta sintonía, sus ensayos clínicos comenzaron hace semanas.
Para esto, cuenta con 10.260 voluntarios que aceptaron la inoculación en sus cuerpos. Uno de ellos es el enfermero español Joan Pons Laplana, quien trabaja en el Hospital de Sheffield del Reino Unido. «Me presenté porque quería acabar de una vez por todas con el Covid. Quiero vivir la vida con esperanza, abrazar a mis seres queridos», comentó.
A principios de junio, el especialista recibió la dosis. Desde ese día, se hace pruebas diarias y cada siete días se somete a un hisopado para conocer si estuvo en contacto con el virus. La próxima semana se hará una revisión médica y un análisis de sangre. En este sentido, señaló que los voluntarios son personas que combaten en la primera línea, porque están más cerca del contagio.
Según relató, es el estudio más prometedor. Esperan tomar una decisión definitiva en agosto. Por lo tanto, la vacuna podría estar en octubre para Europa y noviembre en América. «Estaría antes de la Navidad. Sería un regalo fantástico para la humanidad», indicó. De hecho, la institución ya acordó con Brasil su producción antes de tiempo.
Al mismo tiempo, Laplana aseveró, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, que la vacuna estaría US$ 2,30; lo que fue garantizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). «No dependerá del bolsillo, sino que todos los gobiernos podrán ponerla a disposición de la población», manifestó.