La Universidad de Oxford avanza a paso firme con la vacuna contra el Coronavirus. Su etapa clínica ya está en proceso en el Reino Unido, Brasil y Sudáfrica, a la espera de buenos resultados para su distribución.
En el caso del país africano, hay un argentino que se ofreció como voluntario para su aplicación: Pablo Andrés Berra, tras el mensaje difundido por televisión. La semana pasada recibió la dosis y ya enfrentó el primer control: análisis de sangre e hisopado.
Desde ese entonces, Berra hace vida normal y se encuentra en contacto permanente con los científicos para conocer su evolución. Control que durará durante 12 meses, aunque no descarta la reducción del plazo cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) apruebe la vacuna. Por el momento se encuentra «sin problemas», tan solo padeció una noche con «chuchos de frío, dolor muscular en las piernas».
Antes de recibir la aplicación, «pensaba nada malo me va a pasar si no funciona, y si funciona en buena hora», por lo que nunca tuvo miedo. «Estoy seguro que va a funcionar y va a salir todo bien», afirmó, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, teniendo en cuenta las instituciones que participan del proceso.
Según le detallaron los especialistas, ya hay millones de dosis preparadas en la India, y siguen trabajando 24 horas para aumentar la cantidad. Solo falta la luz verde de la OMS para su distribución mundial.