La Mesa de Trabajo y Consenso (MTC) del Parque Avellaneda difundió el compromiso de funcionarios porteños, directivos de AUSA, la Dirección General de Arbolado y la Agencia de Protección Ambiental para cristalizar beneficios hacia este espacio verde, mediante la regeneración paisajística y la recomposición de la biodiversidad.
Sobre este camino, Ernesto Barreto, integrante del grupo de Arbolado de la MTC, planteó trabajos con AUSA para contener la contaminación de los autos hacia el parque, pensando en su importancia como espacio de salud. Además de las tareas con el grupo de la Wak’a para generar un sector de plantas nativas, con capacidad para iniciativas educativas.
Por otro lado, el vecino señaló la propuesta de reforestación y recuperación de árboles ornamentales, en conjunto con la Dirección de Arbolado. Al parecer, el 29 de septiembre sería la fecha para comenzar parte de las plantaciones. En esta sintonía, expuso, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, que el Ginkgo dará el puntapié inicial, ya que es un testimonio de los hechos ocurridos y la reconversión.
Barreto afirmó que las plantaciones aumentarán cerca del 15%, con la intención de buscar diversidad y no continuar con las especies que ya están muy representadas. De esta manera, funcionarán contra la contaminación, la educación ambiental y la recomposición de la biodiversidad, entre otros puntos. «Son tareas que lamentablemente están quedando muy relegadas en la Ciudad», afirmó, aunque consideró que podría servir como ejemplo para el resto.