Hasta ahora Biden acumula 238 votos electorales con Arizona, contra 213 de Trump.
En una reñida batalla electoral Biden se perfilaba para arrebatarle Arizona a los republicanos, lo que sería un primer revés electoral para Trump. Si continúa la tendencia marcada por el voto por correo, Biden se coronaría ganador. Sin embargo, el actual presidente lejos de aceptar esa tendencia declaró que, apelará a la Corte Suprema para detener el conteo de votos.
“Nosotros ganamos esta elección”, dijo Trump durante un discurso en la Casa Blanca. «Este es un fraude al público estadounidense (…) Queremos que la votación se detenga», enfatizó en esa línea. Mientras tanto el candidato demócrata Biden calificó como “indignantes y sin precedentes” las declaraciones presidenciales y advirtió que su equipo legal está “listo para actuar” si el presidente trata de detener el recuento.
Según las proyecciones de los principales medios, Trump se quedó con Florida y Iowa, donde ganó en 2016; con Ohio, en el que desde 1964 ganaron todos los candidatos que llegaron a la Casa Blanca; y con Texas, un bastión republicano desde 1976.
En este contexto, Biden puede ganar el voto popular y perder la Casa Blanca si no consigue los 270 votos electorales necesarios, de un total de 538 que integran el Colegio Electoral según el sistema de sufragio universal indirecto, como sucedió con Hillary Clinton hace cuatro años atrás.
Según el espacio especializado FiveThirtyEight, «Estados bisagra claves como Wisconsin, Pensilvania y Michigan poseen votos que no serán contados hasta mañana, como temprano. Y también hay retrasos en Georgia”.