Palmeiras goleó a River 3 a 0 en la ida y ahora cierra de local.
Dos minutos de juego en Avellaneda, Jorge Carrascal debajo del arco no puede definir, el arquero Weverton tapa. Parecía un partido más, esos de los que ya vimos muchos, donde el conjunto de Gallardo domina, presiona, mantiene la posesión, genera situaciones de gol, hasta agotar al rival y se lleva la victoria, pero todo cambió.
A los 26 minutos del primer tiempo llegó la apertura del marcador, Armani, en vez de tomar un centro rasante y terminar la jugada, rechazó con los pies, le cayó a Rony, derechazo al segundo palo y un pequeño desvío en De la Cruz significó el 1 a 0 para Palmeiras y el comienzo de los errores de River, errores que le costaron carísimo.
El equipo de argentino siguió con su postura en la cancha, dominante, llegando, generando, pero sin efectividad y así se fue el primer tiempo. A los dos minutos de la etapa complementaria llegó el segundo golpe. Un grosero error en la marca del Sicario Rojas le permitió a Luiz Adriano correr desde la mitad del campo y marcar el 2 a 0.
A los 13 minutos sucedió lo que sentenció el partido, Carrascal se descontroló, infracción con su pierna izquierda para amarilla e inmediatamente intentó un patadón de derecha que no llegó a destino, pero que fue tan evidente, descalificador e innecesario que al árbitro uruguayo no le quedó otra que expulsarlo. Ahí terminó el partido, “el millonario” ya no podía y encima la jugada siguiente un cabezazo de Viña sentenció el duelo.
Fue un partido en el que a River no le salió nada, pero no solo eso, también cometió varios errores y el rival los aprovechó al máximo. Palmeiras define la serie en casa el martes que viene, aunque parece que todo ya está definido.