El intermediario entre el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires y la escritora Beatriz Sarlo, Carlos Díaz, confirmó que el ofrecimiento de la dosis había sido «transparente» y bajo una campaña de concientización de parte del Estado provincial.
En diálogo con Radio con Vos, Díaz aseguró que le había explicado la idea Sarlo y que la esposa del gobernador Axel Kicillof, Soledad Quereilhac, había pensado en la ensayista para generar confianza en la vacuna Sputnik V.
En consecuencia, contó que la autora le había contestado que no quería inocularse si no le tocaba. A la vez, enfatizó en que en el momento de la oferta, que fue en enero, había desconfianza con respecto a las inyecciones producidas en el Instituto Gamaleya.