Las deudas no son para toda la vida

Figurar en el Veraz, en el Banco Central de la República Argentina o que te escriban constantemente desde entidades que han comprado tu deuda a empresas puede tornarse un verdadero dolor de cabeza. Pero ¿qué pasa cuando, además, esta situación te impide acceder a otros bienes o servicios?

Deudas.ar es el primer centro de desendeudamiento integral del país, que nació como respuesta a la cantidad de endeudados existentes en nuestro país. Es que desde el 2020 a la fecha se ha acrecentado el número de personas con complicaciones para cancelar sus compromisos de pago, por pérdida de trabajo, disminución de ingresos y/o dificultades para acceder a la tecnología.

Emanuel Akiki, director ejecutivo de Deudas.ar, aclaró que en muchos casos las personas son hostigadas con amenazas de embargo, aunque no corresponda por ser saldos que ya no tienen vigencia. “Las deudas no son para toda la vida. Tienen un plazo de prescripción. Por ejemplo: tarjeta de crédito, tres años; documentos pagaré, tres años; y créditos personales, cinco años. Entonces, si en ese tiempo las empresas, o un particular, no nos ha cobrado o no nos notificó fehacientemente mediante carta documento, no pueden venir a querer cobrar una deuda después de 10 años”, explicó.

Akiki, quien está vinculado al sector de Defensa del Consumidor hace más de 15 años, detalló que el 80-85% de las consultas que reciben son de la Ciudad de Buenos Aires y de la Provincia de Buenos Aires con distintos casos: “Se ha notado que, fundamentalmente, el porteño ha asumido muchísimas deudas y que mucho tiene que ver con la disminución laboral”.

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