Durante un acto encabezado en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, el presidente Alberto Fernández anunció ayer un bono de 5000 pesos- por única vez en agosto- para los jubilados que cobren dos haberes mínimos.
«Dijimos que íbamos a vacunar primero a los adultos mayores, y los cuidamos. Y los seguimos cuidando cuando Fernanda (Raverta, titular de la Anses) mira atenta los ingresos de los jubilados y no deja que la inflación atente contra sus ingresos», afirmó el mandatario, acompañado por funcionarios nacionales y provinciales.
A su vez, Fernández lanzó el Programa Integral de Reconocimiento de Períodos de Aportes por Tareas de Cuidado. “Queremos reconocer la tarea de las mujeres que dedicaron tiempo al cuidado de sus hijos y sus hijas. El trabajo se presenta desigual en la casa y tienen que ser reconocido”, explicó Raverta.
Después de los anuncios, el Defensor del Pueblo de la Tercera de Edad de la Ciudad de Buenos Aires, Eugenio Semino, remarcó la situación desesperante de los adultos mayores, quienes no pueden cubrir un 30- 35% de las necesidades básicas de la canasta.
«Cuando traducimos los 5 mil pesos a la vida cotidiana son 160 pesos por día. Es decir, un kg. de pan, un yogurt o pagar alguna deuda de expensas viejas», marcó. Si bien es bienvenido para el bolsillo, sostuvo que no revierte el presente de la tercera edad. Sumado a la atención sanitaria por falta de la segunda dosis o el cuidado post- Covid.
En este sentido, Semino aseguró que la política está ausente y sigue discutiendo sus posicionamientos en las listas, mientras los abuelos están totalmente abandonados. Por eso, insistió con el abuso y el maltrato estructural por parte del Estado. De todos modos, planteó que el sector sabe que lo «están estafando y se están riendo».
Por último, el referente resaltó, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, la ampliación de derechos, en relación al nuevo programa. Sin embargo, hizo foco en su costeo y no volver a «lo que se hizo innumerabilidad de veces, que los que están adentro financian a los de afuera».