La Justicia suspendió el acuerdo entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) y el grupo IRSA para construir un barrio de torres en la Costanera Sur, hasta que el Ejecutivo porteño presente estudios sobre el impacto ambiental del proyecto en una audiencia pública.
Por su parte, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, la coordinadora de la cátedra libre de Ingeniería Comunitaria, María Eva Koutsovitis, destacó que el GCBA buscaba construir torres de 145 metros de altura, y que la idea significará el mayor despojo de tierras de la historia del distrito.
A la vez reveló que en 1964, el Congreso le había vendido al Club Atlético Boca Juniors esas tierras, a cambio de la construcción de una ciudad deportiva. Luego, según Koutsovitis, en 1989, como se había superado el tope de territorio habilitado para rellenar, ambas Cámaras dieron por terminada la obra de los espacios de deporte. Luego, lla especialista remarcó que en 1997, IRSA compró los terrenos, que habían sido adquiridos en 1993.
En ese sentido recalcó que no se podían hacer edificios allí porque el lugar estaba destinado a lugares deportivos, y que, si la idea se llevaba a cabo, se fomentarán las diferencias entre el este de la Ciudad y el resto, que quedará de espaldas al río y con «mala conectividad».