El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, aprobó las nuevas medidas tomadas por la Nación, y destacó que las flexibilizaciones anunciadas por el área sanitaria seguían la línea en la que la Ciudad se había encaminado hacía semanas, durante la presentación de un plan de participación urbana, en la sede gubernamental de Parque Patricios.
En ese sentido, si bien la pandemia no se terminó, Larreta advirtió que Argentina estaba en otra etapa; aunque, desde su punto de vista, la población debía mantener los cuidados sanitarios. Al mismo tiempo, el funcionario señaló que recibía con satisfacción las políticas del Estado nacional.
Esta mañana, en una conferencia de prensa, la ministra de Salud y el jefe de Gabinete de la Nación, Carla Vizzotti y Juan Manzur, determinaron que el uso del tapabocas dejará de ser obligatorio en el caso de estar al aire libre y sin personas alrededor, a partir del 1 de octubre.
También, se quitaron los aforos de las actividades económicas, gastronómicas, comerciales actividades económicas, industriales, de servicios, religiosas, culturales, deportivas, recreativas y sociales. En los espacios cerrados, la utilización del barbijo será obligatoria. También, se habilitaron, con un 50% de la capacidad, los lugares bailables para quienes tengan las dos dosis y hayan completado su esquema hasta 14 días antes del evento.
A la vez, en las actividades en espacios abiertos y de más de 1.000 personas, se permitirá una ocupación del 50% del espacio. Además, de forma paulatina, ente octubre y noviembre, se abrirá el cupo para el ingreso de extranjeros vacunados con las dos aplicaciones contra el COVID-19.