El expresidente Mauricio Macri afirmó ayer en una entrevista que el juez Martín Bava cumplía una tarea ordenada por el kirchnerismo, tras la declaración indagatoria en Dolores por la causa del presunto espionaje ilegal a los familiares de las víctimas del submarino ARA San Juan en 2018.
En el texto, el exmandatario resaltó que la velocidad con la que había actuado la Justicia demostraba que se pretendía calzar al caso con el calendario electoral. A la vez, acusó que el juzgado ya tenía decidido condenarlo antes de oírlo.
Asimismo, el exjefe nacional destacó que no había espiado a alguien, y que no había utilizado información de inteligencia sobre los allegados de los fallecidos en el buque. A la vez, negó haber visto antes los informes presentados en el caso.