Luego de semanas de internas en la coalición de gobierno, el viernes a la tarde en Chaco Cristina Kirchner comenzó el principio del fin, con el fuerte discurso que proclamó en contra del Gobierno: arrancó la disolución del Frente de Todos en tiempo real.
Actualmente, la realidad de Cristina Kirchner al día de hoy en cuanto a las elecciones es prácticamente nula para el 2023. Por eso es que hoy el kirchnerismo intenta “blindar” la provincia de Buenos Aires y sumar a otras provincias. “Por eso es que hizo la presentación en tierras de Capitanich”, aseguró Sartelli.
Es algo similar a lo que ocurrió en 2015, cuando el grueso de los funcionarios se tuvieron que recluir en La Matanza; en ese momento, no llegaron siquiera a retener la provincia de Buenos Aires y muchos funcionarios terminaron en el gabinete de Verónica Magario.
Como internas hay en todas las coaliciones, la oposición no escapa a ello. El episodio de Alfredo Casero en La Nación+ fue “folklórico”, remite al ciudadano enojado que no quiere ninguna concesión con el kirchnerismo.
Hoy en el “círculo rojo” está la ecuación Larreta-Melconian, son lo que la burguesía quiere. Larreta aglutina a los opositores que dejan afuera el “disparate” y Melconian va a ejecutar un plan como el de Macri pero acelerado.