A punto de terminar el año, el eje del programa económico está jugado en cumplir las metas con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Lo que implica un ajuste muy severo para los sectores populares: trabajadores, jubilados y beneficiarios de planes sociales.
Según su análisis, no habrá un tercer dólar soja, porque el producto no estará disponible. Sin embargo, no descartó alguna diferenciación con el trigo. De este modo, el Ejecutivo apuesta a terminar el año con un récord de exportaciones y con la debida acumulación de reservas, que sumado al último desembolso del Fondo que en caso de aprobarse la revisión otorgaría un monto de USD 5.800 millones antes de fin de año, permitiéndole al gobierno llegar olgado a febrero. Luego, será el momento de sentarse con los sojeros grandes durante marzo y discutir a qué dólar será la liquidación.