La Legislatura Porteña se encamina a aprobar el nuevo Código Urbanístico, propuesto por Jorge Macri. El proyecto ya pasó su primera lectura y espera su aprobación definitiva antes de fin de año, no sin antes pasar por diferentes audiencias públicas. En diálogo con FRECUENCIA ZERO, Juan Ignacio Kinder, arquitecto especialista en ciudades y gobierno, analizó cuáles son las principales modificaciones que impulsa dicha iniciativa en la Ciudad.
El especialista destacó los “cambios en las alturas y las profundidades de construcción”, teniendo en cuenta diferentes categorías que establecen nuevos límites en cuanto al volumen máximo de las construcciones. Un ejemplo de ello es el USAB 1, “que antes era de 14 metros y ahora debe ser de 12”. Asimismo, se fija el USAB 0, “una nueva categoría que establece un máximo de 9 metros para barrios residenciales, a partir del reclamo de grupos vecinales en barrios como Villa Devoto y Belgrano”.
- Impulsar el desarrollo del sur: “el espíritu de este nuevo Código es densificar el sur de la ciudad con un nuevo incentivo que se llama capacidad de construcción adicional para que todas las desarrolladoras que construyan en el sur ganen metros cuadrados en los barrios del norte”, explicó. Además, resaltó que, actualmente, “hay 50 mil viviendas en construcción, de las cuales el 70% se ubica en la zona norte”.
- Zonas verdes: “se quieren hacer pulmones de manzana más grandes y la superficie construible va a pasar de ser ⅓ a ¼, con lo cual de 100 metros ahora se pueden construir 25 metros, además, se quiere catalogar a las plazas como urbanización parque para conservar el suelo absorbente”.
- Balcones: “en la primera lectura se eliminó la prohibición de balcones en la línea municipal; hablar de cuidar la identidad barrial cuando se están perdiendo elementos arquitectónicos tan característicos de la Ciudad como los balcones, hacía que el Código sea un poco hipócrita”.
- Edificios en barrios residenciales: “Se van a prohibir edificios en altura en barrios tales como Parque Chas y Villa Devoto, no así en Palermo y Puerto Madero, que son zonificaciones especiales donde sí está permitido”.
- Protección del patrimonio: “hay 4.200 inmuebles con valor patrimonial, pero deberían ser más; el catálogo lo hace la Legislatura y eso estuvo parado hace años, no es solo una responsabilidad del Ejecutivo”. Por último, expresó que “los desarrolladores tienen un desprecio absoluto por el patrimonio” y dejan abiertas ventanas de casas históricas abandonadas para que el efecto del aire destruya las viviendas.