El comisario retirado Rubén Rimoldi asumió este miércoles como nuevo ministro de Seguridad de Santa Fe en reemplazo de Jorge Lagna, a quien el gobernador Omar Perotti le pidió la renuncia en medio de la ola de homicidios que azotan a Rosario.
Carlos Del Frade, legislador provincial de Frente Social y Popular de Santa Fe, analizó la situación actual que vive la provincia en materia de inseguridad y resaltó que esto arrancó en 1978, durante la última dictadura, cuando llegó el primer cargamento de cocaína desde Bolivia por un acuerdo entre el presidente de facto Rafael Videla y el presidente de facto boliviano Hugo Banzer. «Esto demuestra que el narcotráfico es un negocio de arriba hacia bajo y de adentro del Estado con sus nichos corruptos hacia afuera», apuntó Del Frade.
A partir de ese negocio cooperativo con el Estado, en el 2007 se desarrolla un proceso donde se ingresa en el negocio internacional porque México demanda importaciones de efedrina y Argentina es la que le vende la efedrina a los narcotraficantes mexicanos. Por este motivo, se procesan a integrantes de la Secretaría de Lucha contra el Narcotráfico.
Luego en el 2013 comienza un «boom» inmobiliario con lavado de dinero y se da el asesinato del Pájaro Cantero, que era el líder de «los monos». Posteriormente se da un acontecimiento donde «las bandas son narcopoliciales en complicidad absoluta de nichos de corrupción de la policía».
«Hoy ante una gran democratización de las armas, es muy fácil encontrar un arma en el Gran Rosario y Santa Fe tenemos este número de homicidios. Son negocios y hay que cortar la circulación del dinero y en eso los partidos políticos grandes no hacen nada», apuntó Del Frade en diálogo con FRECUENCIA ZERO
El crecimiento de la violencia en este tipo de situaciones se dio, de acuerdo con lo planteado por Del Frade por la preponderancia que tenían anteriormente los «viejos jefes» tenían una mayor preponderancia. En la actualidad, con la caída de estos jefes que tenían mayor peso, y comenzaron a surgir jovenes con acceso a armas que entienden que la forma más rápida de hacer dinero es ser «más violento».
