Review Death Stranding: uniendo el espíritu al cuerpo
Finalmente Death Stranding, la última aventura de Hideo Kojima (Metal Gear Solid) llegó a PC con algunas mejoras gráficas, cosméticos de Half-Life y el modo foto. ¿Qué más tiene? Un juego diferente que puedes amarlo y odiarlo según como lo observes. Por mi parte… yo lo amé.
Death Stranding ya esta disponible para PS4 y PC.
Atando los nudos
La historia de Death Stranding es difícil de resumir aunque en términos generales nos presenta un mundo devastado y separado. El “Death Stranding” fue un evento que unió el mundo de los muertos y de los vivos provocando la aparición de espectros llamados BT. Estos intentaran arrastrarnos al mundo de los muertos ni bien nos detectan. Por otro, la lluvia que cae ocasionalmente en el planeta provoca el crecimiento y envejecimiento prematuro de todo lo que toca. Por último, cuando un BT se fusiona con un humano se provoca un vacio; una gran explosión de materia que destruye todo a su paso.
Nuestro protagonista es Sam Porter Bridges (Norman Reedus), un mensajero que lleva paquetes y encomiendas a través de Estados Unidos, tratando de evitar los BT y también un grupo terrorista llamado Homo Demens.
Pero claro que el objetivo de Sam es más que ser un delivery del fin del mundo. Le es encomendada la difícil tarea de conectar diversas instalaciones a la red quiral, una especie de internet y servicio de comunicación. De esta manera poder unir a todos los habitantes de Estados Unidos.
Como es habitual en los títulos creados por Hideo Kojima preparen los pochoclos porque gran parte de la aventura se cuenta en extensas cinemáticas. No solo de una definición visual increíble, sino también con hipnóticos diálogos, enfrentamientos extraídas de grandes blockbusters y actuaciones variadas (quizás la de Reedus la más floja) con actores, actrices y directores: Léa Seydoux, Mads Mikkelsen, Nicolas Winding Refn, Guillermo del Toro y el veterano en dar voz a personajes de videojuegos como es Troy Baker (Bioshock Infinite, Infamous Second Son, The Last of Us).
Death Stranding es un juego de ciencia ficción pero como otros referentes en el género, Kojima no duda en incluir algunos elementos de filosofía en la obra. Preguntas existencialistas como ¿qué es el alma? Pero también esta necesidad de los seres humanos de estar conectados. Hoy parece ser tan actual con la pandemia, en donde nuestros vínculos virtuales son lo que nos une y nos da fuerza para salir adelante.
Trabajos forzosos pero gratificantes
En términos jugables aquí es donde los jugadores se dividen entre dedicarle un par de minutos a no poder dejar de jugarlo durante horas. No podemos decir que Death Stranding es un walk simulator. Primero porque el peligro es mucho más realista y segundo porque la cantidad de opciones que brinda el título lo hacen casi merecedor de un género a parte: una mezcla de walk simulator, con acción en tercera persona y elementos de construcción e ingenio.
Arrancamos la aventura mal, ya que perdemos nuestra moto que agilizaría los tramites. Nos queda caminar de aquí para allá. Nuestro primer enemigo es el terreno. El realismo que maneja Death Stranding en montañas vertiginosas, arroyos peligrosos e incluso vientos que nos tiran para atrás. Cada elemento le suma dificultad a llevar un paquete. Y la verdad es que muy pocas veces nos preocupa la salud o resistencia de Sam, todo tiene que ver con el estado de los paquetes.
Como mencionamos en la historia, nuestras misiones son en su gran mayoría transportar cosas. Si la lluvia nos agarra de por medio, los paquetes empezaran a destruirse. Si nos caemos, nos golpeamos, perdemos equilibrio o nos agarra un BT; perdemos los paquetes. La cajas pueden recuperarse con un aerosol pero si su contenido es destruido, ya solo sirve como reciclaje.
Las caminatas pueden ser largas, pero la mayoría nos dan libre albedrío ya que recordemos que Death Stranding no deja de ser un juego de mundo abierto. Así que cuando estamos en un lugar podremos o tomar el camino largo y esquivar una gran montaña o tratar de escalarla.
Sam cuenta con varios elementos a su disposición: escaleras, ganchos y sogas, lineas para unir un punto a otro. También grandes construcciones como puentes, carreteras, buzones, miradores, cargadores; etc. Para construir claramente necesitamos metales y eso también podemos conseguirlo. Llegará un punto de la aventura que ese abandonado paisaje que vimos al principio estará atestado de estructuras. ¿y esto por qué es?
Cuando conectamos la red quiral a una terminal, también conectamos esa zona a internet. No vamos a poder ver otros jugadores en linea pero si las estructuras que dejaron en el camino. Podemos usarlas y darles likes como si fuera una red social. También encontramos paquetes que fueron abandonados por otros jugadores y no fueron entregados. Podemos hacerlo por ellos, o llevarlo hasta un buzón y dejarlo en un compartimiento compartido para que lo haga otro. Todo permite que sumemos puntos en diversas habilidades de desempeño: la principal poder aguantar más peso. Ya que por más que carguemos a Sam con paquetes en la espalda, en la cintura, en los brazos y piernas; tampoco es Superman. Más adelante en la aventura contamos con vehículos y carritos que nos facilitará bastante esto.
A todo esto, Sam cuenta con un BB acoplado a su pecho, un bebe adentro de una capsula que crea un vinculo, nos muestra imágenes del pasado pero también nos permite sentir o percibir a los CV. No podemos dejar que nuestro BB se estrese.
También contamos con una pequeña antena que escanea el terreno y nos indica si hay infraestructuras cerca o paquetes. Y un brazalete que funciona como mapa y como menú para re-ordenar nuestro inventario y grabar las partidas.
Ahora con respectos a nuestros enemigos los CV y los terroristas aquí el creador de Metal Gear hace eco de su conocimiento. La acción puede ser desaforada pero la recomendación es siempre ser sigilosos, aguantar la respiración y que Solid… digo Sam vaya agachado entre los arbustos.
Los terroristas llevan carga y pueden robarnos la nuestra, atacan con diversas armas y se guían por unos sensores ubicados a lo largo del mapa que detectan nuestra posición. Unos cuantos golpes, una cuerda por atrás o un disparo pueden acabar con ellos.
Los CV son un poco más complicados. Como dijimos, mejor evitarlos. Pero hay ciertas misiones que nos enfrentan si o si a ellos. Cuando los tenemos de frente podemos arrojarles granadas hemáticas que consumen un poco de nuestra sangre o también podemos usar bolsas de sangre para ello. Si llegamos a ser atrapados por uno, seremos arrastrados perdiendo muchas veces nuestros paquetes y grandes criaturas aparecerán y cubrirán con una especie de alquitrán todo el escenario. Ahora o escapamos con mucha dificultad hasta un lugar sin esta materia oscura o seguimos arrojando granadas hasta destruir al enemigo.
La granadas EX también son de utilidad y se consiguen utilizando fluidos de Sam, ya sea cuando hace pis, caca o se ducha. Si, lo más extraño que se les pueda ocurrir.
Hay muchos otros elementos que tiene Death Stranding, pero hablar de ellos le quitaría un poco de misterio al título de Kojima. Lo importante en cada travesía que hacemos es que esa sensación que experimenta una persona en la vida real cuando escala o atraviesa un largo camino para llegar a un lugar, esta perfectamente trasladada al juego. Cuando estamos cerca de nuestro destino es como si nos sacáramos un peso de encima, físico y emocional.
La versión PC de Death Stranding añade misiones especiales alrededor del mundo Half-Life para obtener cosméticos, vehículos e incluso el guante de gravedad en Half-Life: Alyx. También contamos con un modo foto lleno de opciones para apreciar mejor los escenarios y a Sam.
La octava maravilla de Kojima
Por más empeño en una historia cinematográfica y conmovedora, con mecánicas de sigilo, acción y construcción, Death Stranding no estaría completo sin un apartado visual al nivel que promete.
En más de una ocasión vamos a sentarnos con Sam para observar el paisaje desde una alta montaña, pero también desesperarnos cuando los CV intentan atraparnos. Hay pequeñas ciudades abandonadas que sirven como refugio, sus estructuras son lineales pero también funcionales, pero también escenarios más cerrados y que tienen mucho que ver con el avance del juego.
La música tiene muchos temas, entran en el momento justo y no se sienten para nada forzados.
Requisitos mínimos: Windows 10 (64-bit) o superior – Procesador Intel Core i5 3470 o AMD Ryzen 3 1200 o superior – Memoria: 8 GB de RAM – Gráficos: Geforce GTX 1050 3GB o AMD RADEON RX 560 4GB RAM – Almacenamiento: 80 GB de espacio disponible.
Requisitos recomendados: Windows 10 (64-bit) – Procesador: Procesador: Intel i7 3770 o AMD Ryzen 5 1600 o superior – Memoria: 8 GB de RAM – Gráficos: Geforce GTX 1060 6GB o AMD RADEON RX 590 O SUPERIOR – Almacenamiento: 80 GB de espacio disponible
Conclusión
La llegada de Death Stranding a PC le da a los usuarios una oportunidad de probar una de las joyas que dejo la generación de Playstation 4.
Como dije previamente, no se puede juzgar a un libro por la portada. Si la mayoria de trailers y gameplays te muestran a Sam corriendo de un lado a otro y piensan que todo el título es eso; se perderán mucho más de lo que puede ofrecer Hideo Kojima.