Hace ocho años que no se otorgan los Premios Municipales en CABA
La colectiva de Autoras, junto a otras instituciones como SADA (Sindicato argentino de autoras y autores), ARGENTORES (Sociedad general de autores de la Argentina) y La Unión de Escritoras y Escritores enviaron una carta al Ministro de Cultura de La Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Enrique Avogadro, a expresando su enorme preocupación ante el estado de parálisis en el que se encuentran los Premios que otorga a los artistas el Gobierno porteño, conocidos como “Premios Municipales”, los cuales tienen un amplio reconocimiento no solo en el ámbito teatral y literario, sino en toda la cultura de nuestro país.
Susana Torres Molina, dramaturga, directora, docente e integrante de La Colectiva de Autoras, contó : “ La cuestión es que hace 8 años, o sea, cuatro bienios que hubo convocatorias donde los escritores, dramaturgos enviaron sus materiales y no han convocado al jurado para que falle y evalúe esos materiales”.
Es decir para el Premio a la dramaturgia, los Premios literarios para las categorías de Poesía, Ensayo, Cuento y Novela y los especiales Eduardo Mallea y Ricardo Rojas, se han efectuado cuatro convocatorias que abarcan los bienios 2012/2013, 2014/2015, 2016/2017, 2018/2019. Sin embargo, y pese a que los autores y autoras han respondido con el envío de sus obras, aún ni siquiera se han constituido los jurados, después de transcurridos —desde 2012— ocho años. Además, durante 2020 no se efectuó la convocatoria correspondiente, pese a estar contemplada por ley.
Ayer, durante la reunión que el ministro tuvo con personas que integran la Asamblea Permanente de las Artes Escénicas se planteo la problemática con los premios pero no encontraron respuesta.
Torres Molina, asegura que «es un concurso importantísimo junto al Premio Nacional y es tan relevante porque el que gana el primer lugar obtiene una pensión vitalicia a partir de los 50 años, que es muy necesaria, porque el oficio de la escritura es un oficio discontinuo, azaroso y son contados con los dedos de una mano los que pueden vivir solamente de escribir”.