“En Argentina es necesario consensuar un plan económico”
Martín Hourest, economista y precandidato a diputado nacional en la Ciudad por Alternativa Ciudadana, en diálogo con FRECUENCIA ZERO comentó que los motivos que los impulsan a seguir a la arena política y expuso sus propuestas para mejorar la realidad del país.
Martín Hourest encabeza la lista de Alternativa Ciudadana y es acompañado por Daniela Gasparini como precandidata a legisladora porteña. En primer lugar hizo un repaso su trayectoria política y puntualizó los temas que lo llevan a seguir involucrándose para cambiar el estado actual de las cosas: “Las ganas de seguir en política siguen por el afecto y por todo lo que a uno le afectan las cosas. Yo empecé a militar en 1973, en la primera campaña interna de Raúl Alfonsín, en ese momento una de las consigna era que Argentina tenía que ser un país sin excluidos, hoy en 2021 todavía estamos lejísimo. En 2001, cuando el país estuvo a punto de estallar y convocamos a una inmensa movilización popular como lo fue el Frente Nacional Contra la Pobreza (FreNaPo) la consigna era la mayoría de los chicos son pobres, la mayoría de los pobres son chicos, ningún hogar pobre en Argentina, de esto ya pasaron 20 años y sigue vigente. Por eso, dicho en términos barriales, después de tanto esfuerzo colectivo, uno no le puede sacar la cola a la jeringa. Mirando la Argentina de hoy, veo que está atrapada, destruida. Yo soy economista y veo que tenemos el mismo producto per cápita que en 1974, estamos en el mismo nivel de riqueza que cuando éramos 24 millones de argentinos, pero en ese momento el índice de la pobreza era del 4%, entonces podemos ver que se multiplico por 7. En el medio pasaron catástrofes económicas y sociales, las dictaduras, gobiernos neoliberales, paso la imposibilidad de sostener la imagen de ese país de clases media, integrado, pujante con menores condiciones de desigualdad. Nosotros queremos retomar ese sueño, no un país donde una minoría traccione el funcionamiento colectivo y el resto sobreviva en condiciones cada vez peores. Eso es lo que se discute en estas elecciones”.
Acerca de las claves para cambiar la situación nacional, Hourest señaló: “Hay que discutir en serio como una sociedad que se ha empobrecido sale de esa situación sin descargar todo el peso sobre los pobres. Debemos salir de la pobreza con mayor nivel de justicia. La primera cosa es reconocer quien está haciendo el esfuerzo y quienes no, a quienes no se les puede pedir más. Todas las asignaciones sociales donde está incluida la AUH representan menos del 1.5% del PBI, mientras los subsidios a los capitales más concentrados representan más 3, 5 puntos del Producto Bruto Interno. Con lo cual en Argentina no salen caros los pobres, salen caros los ricos. Somos uno de los países de América Latina en donde los empresarios hacen el menor esfuerzo para invertir. El punto es que no hay una presión impositiva grave sobre todo el conjunto de la sociedad, está mal impuesta: se paga mucho de IVA, los asalariados pagan mucho de Ganancias, hay sobrecarga de presión fiscal sobre las Pymes. Ahora si miramos los impuestos sobre los grandes patrimonios, sobre capitales fugados, sobre la renta financiera, si vemos como se grava la minería, el petróleo nos damos cuenta que el problema no es que se cobran muchos impuestos, es que se cobran mal. Sobre esta hipótesis, desgraciadamente terminan pagando más los que están de la mitad para debajo de la pirámide. Paga más la clase media, los trabajadores, los cuentapropistas y las Pymes, para que los más grandes no paguen y esto es un problemón”.
Por último, el precandidato por Alternativa Ciudadana, enfatizó sobre la necesidad de planificar la economía para que en el futuro el país tenga un crecimiento armonioso y sustentable: “Los países funcionan con una lógica de planificación económica, que la hace el estado o la hacen las empresas y el estado corre de atrás. En Argentina no se discute ningún tipo de plan. El último plan nacional de desarrollo fue en 1985, cuando Alfonsín planteó el plan de crecer con equidad. Luego vino Menem que dijo el mercado decide. Luego vinieron los Kirchner, dijeron razonablemente que había consumo reprimido y desindustrialización, por eso vamos todo para adelante. Ahora, todo para adelante sin plan es ir al precipicio, porque Argentina tiene una estructura productiva deformada, que no genera empleo, que no genera divisas y se sostiene sobre la base de una economía informal que lleva a un sufrimiento colectivo a millones de argentinos. Hay que abordar una discusión de planificación. Por eso es necesario que la democracia tiene que tener poder para que cuando haya un plan colectivo para integrar a los sectores dominantes, si no está perdida, porque serán esos sectores los que impongan por donde ir”.