El gobierno de la Ciudad de Buenos aires se encuentra sumergido en una nueva polémica. Desde hace algunos meses se llevan a cabo reformas en el Carlos Thays, pero según denuncian los vecinos, estas no respetan el diseño original del paseo.
Desde la Fundación Ciudad y de la Asociación Amigos del Lago de Palermo afirman que la idea es un “adefesio” y que no respeta el diseño planteado por Thays. Según explican, el paisajista «usó un cerco liviano de postes y alambrado en todo el perímetro. De esta manera, se exaltaba la presencia de las especies vegetales como los verdaderos protagonistas de toda la composición».
Desde el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad, encargados de la obra, explicaron que la reforma tiene como fin jerarquizar el acceso al Jardín construyendo «un cerco semitransparente en chapa perforada como identificador institucional» y hacer una cubierta «que sirva para unificar y proteger contra la lluvia y el sol». También mudarán «el puesto de control e informes hacia la vía pública y planean sumar iluminación, ampliar la vereda y poner un solado con siluetas de hojas impresas en bajo relieve».
Desde la organización, Basta de demoler repudian las nuevas obras y la forma de encarar el proyecto. A través de un comunicado, afirman que el espacio «merece sin duda que se gaste presupuesto para su mantenimiento e higiene, que se oiga la palabra de los especialistas que aquí trabajan y que la sencilla tarea de ocultar los tableros eléctricos se haga de manera eficiente y elegante».
También piden que «se respete la participación ciudadana, para reclamar por la responsabilidad de los funcionarios en el manejo displicente del gasto público, para exigir que se nos devuelva lo que se nos ha escamoteado».
