La legislatura porteña aprobó la ley que modifica el artículo 53 del Código Contravencional de la Ciudad para establecer como un agravante la agresión a trabajadores de la salud y la educación.
A partir de su promulgación se duplicaran las sanciones ( que eran de 1 a 5 días de trabajo comunitario, una multa de 200 a 1.000 pesos o 1 a 5 días de arresto) “cuando la víctima es trabajador de la educación, sea docente o no, o trabajador de la salud, sea profesional o no, y el hecho tiene lugar dentro del establecimiento donde se desempeña, o fuera de él siempre que la conducta esté motivada en razón de su tarea, función o cargo”.
Los legisladores Clodomiro Risau, Patricia Vischi y Hernán Arce explicaron que “por el notable incremento de agresiones y hechos de violencia protagonizados por padres o personas relacionadas con los alumnos, en perjuicio de trabajadores docentes y no docentes, por cuestiones derivadas de la función docente o de la convivencia en el ámbito escolar, afectando seriamente la seguridad personal de los trabajadores y perturbando la misión educativa y formativa que debe cumplirse en ese ámbito”.
