la difunta Lectoure se lo ha legado a la Iglesia Católica
LA TIERRA PROMETIDA (POR ERNESTINA)
El sobrino de Tito Lectoure, quien regenteó durante décadas el mítico estadio, confesó que lo tomó por sorpresa la noticia de que la Iglesia será uno de los nuevos dueños del lugar. «No imaginábamos esa decisión, porque estando ‘Tito’ con vida e incluso después de su fallecimiento, ella siempre decía que el Luna Park iba a ser siempre de los Lectoure», contó Esteban Livera, quien desde hace años se desempeña como coordinador general del anfiteatro porteño.
«Nos enteramos de todo en febrero, cuando se abrió el testamento de Ernestina; para nosotros fue una sorpresa», reconoció el sobrino de Tito Lectoure.
Respecto a la composición accionaria del Luna Park, Livera detalló que «es una sociedad que era de dos: el 95 por ciento de Ernestina y el 5 de Tito. Ella heredó el 50 por ciento cuando falleció su marido y con los años le fue comprando el resto a la familia Pache; cuando tuvo el 100 por ciento de la propiedad, le cedió un 5 a Tito».
El coordinador del Luna Park, que es el representante de los socios herederos de Lectoure, apuntó que aún no tuvo contacto con los representantes de Cáritas ni de la sociedad Salesiana San Juan Bosco: «Nosotros seguimos con el 5 por ciento. No conocemos a nadie. Cuando se cumplan todos los pasos legales, entiendo que ellos (los flamantes dueños) podrán manejar el 95 por ciento».
Ernestina Lectoure, tía de Tito, falleció el 9 de febrero pasado, luego de una larga enfermedad. Al no tener hijos a los cuales heredarles su patrimonio, en su testamento resolvió dejar el 95 por ciento de la sociedad Stadium Luna Park Lectoure y Lectoure SRL a la Sociedad Salesiana de San Juan Bosco y a la organización Cáritas, que legalmente responde al Arzobispado de Buenos Aires.
PARA ATRÁS
Ernestina Lectoure, de 95 años de edad, falleció el 9 de febrero pasado, luego de una larga enfermedad. Como no tenía hijos, en su testamento resolvió dejar el 95% de la sociedad Stadium Luna Park Lectoure y Lectoure SRL. a la Sociedad Salesiana de San Juan Bosco y a la organización Cáritas, que legalmente responde al Arzobispado de Buenos Aires.
Ambas entidades religiosas deben repartirse el legado en partes iguales. Una vez que la Inspección General de Justicia (IGJ) apruebe la sucesión, la Iglesia argentina pasará a controlar el mítico estadio de box, que supo ver grandes recitales, memorables peleas e históricos actos políticos.
El 5% restante de la sociedad que controla el Luna Park, en tanto, seguirá en manos de un grupo de familiares y herederos de Juan Carlos «Tito» Lectoure, sobrino de Ernestina, según informó este lunes el diario ‘La Nación’.
«Tras la muerte de Ernestina, única gerente de la sociedad, «Hoy el Luna Park está acéfalo» el Luna Park está acéfalo hasta que la IGJ apruebe la inscripción de las cuotas a las dos entidades de la Iglesia», detalló Miguel Ángel Lectoure, sobrino de «Tito» e integrante de la sociedad.
Las especulaciones respecto al futuro del estadio están a la orden del día. Aunque fuentes eclesiásticas aseguraron que el inmueble tendrá un futuro «uso comercial» como el resto de las propiedades que explotan, no se especificó qué destino se le dará al recinto.
Durante años, circularon las versiones acerca de un proyecto para construir un complejo de torres donde hoy se emplaza el Luna Park. Sin embargo, el llamado «palacio de los deportes» fue declarado monumento histórico nacional en 2007, por lo que cualquier modificación que quiera hacérsele debe contar con una autorización de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos de la Secretaría de Cultura de la Nación.
Consultado acerca del futuro del estadio, el sobrino de «Tito» Lectoure se preguntó: «¿Cómo van a hacer un recital de Village People en el Luna Park? Sería algo contrario a lo que promulga la Iglesia».
El Luna Park no es la única propiedad que Ernestina de Lectoure dejó en manos de la Iglesia. Entre otros bienes, además del departamento donde ella misma vivía, locales en la avenida Santa Fe, más de diez cuentas bancarias y una caja fuerte, a Cáritas y la Sociedad Salesiana les fueron destinadas dos parcelas en el Jardín de Paz de Pilar. En tanto, los familiares y herederos de «Tito» Lectoure recibieron una bóveda en el cementerio de la Chacarita como único legado.
A las propiedades legadas se suma una millonaria colección de obras de arte de artistas como Quinquela Martín, Spilimbergo, Pettoruti y Soldi, destinados al museo Benito Quinquela Martín de La Boca, e importantes cifras de dinero de las que resultó beneficiario, entre otros, el apoderado de la señora de Lectoure.
Declaraciones del periodista Walter Nelson en Tal Cual (Radio Splendid AM 990):
«Lucas Matthyse tiene la revancha confirmada con Danny García».
«La derrota de Matthyse fue muy digna. Está muy bien considerado en el negocio».
«Si hay que convencer a Cáritas para que siga el Luna Park, prometo ir a misa todos los domingos».
«Hay muchas historias en el Luna Park, no solo de boxeo sino un montón de actividades que no están vinculadas al deporte».
«Floyd Mayweather es un boxeador de cualquier época».
Tal Cual/Radio Splendid AM 990