Un sueño en París de Sergio Cucho Costantino
Surgido a principio de los 80, Trottoirs de Buenos Aires se consolidó en París como el lugar por excelencia para el reencuentro de los argentinos, pero también para todos aquellos parisinos y turistas que querían escuchar tango del mejor nivel.
El documental acompaña a Jean Pierre Noher mientras visita lugares y entrevista a algunos de los actores que fueron parte de la fundación del mítico lugar. Mezclado con historias de exilio, añoranza y amistad, Un sueño en París recorre el camino del emblemático bar desde su concepción hasta su cierre, incluyendo la influencia que el mismo tuvo en revivir la pasión del tango en nuestro país.
Francés de nacimiento pero radicado en la Argentina cuando todavía era muy pequeño, Jean Pierre Noher siente en primera persona la unión que entre ambas ciudades existe. Sin necesidad de proclamarse como un amante del tango, abre el documental entonando uno, con el sentimiento y la pasión que lo da a entender sin necesidad de mediar palabras.
Las entrevistas parten desde un apacible bar en un barrio porteño donde la ubicación y el nombre se transforman en los primeros eslabones de esta historia que parece, igualmente, entramada y sencilla al mismo tiempo, la de realizar un emprendimiento titánico, pero hecho por mucha gente con un objetivo en común: crear un lugar de pertenencia en París donde los argentinos puedan reunirse y escuchar la música que nos define ante el mundo, aunque en ese momento no nos representase dentro de nuestro territorio.
Hay dos elementos que vuelven a Un sueño en París un documental hermoso de ver. Por un lado, todos los entrevistados están apasionadamente ligados a la historia. Los recuerdos que tienen son revividos con emoción y alegría, y aunque seguramente hubo anécdotas que preferirían no recordar, las mismas no tienen espacio en este film donde la búsqueda está apuntada a rememorar los felices momentos vividos antaño en esa maravillosa ciudad.
Por otro lado, la presencia de Jean Pierre Noher como entrevistador le agrega un extra al relato. La cordialidad y naturalidad en el vínculo con los entrevistados hace que uno se olvide que está viendo una película y se sienta como observando una conversación entre amigos, transformando incluso las constantes interrupciones de Noher a sus entrevistados en algo simpático, en lugar de ser algo con carga negativa como podría sentirse en cualquier otro documental.
El film tiene algunas poco creíbles reconstrucciones, pero eso no afecta el relato. Donde se podría haber mejorado el producto es en algunos aspectos técnicos que, por lo menos en la copia que pude ver yo, empobrecen el material. Los focos de la cámara en muchos planos están poco precisos y hay varios momentos donde, de manera extremadamente notoria, se produce un desfasaje entre lo que está diciendo el personaje y lo que se ve en cámara.
Un sueño en París es un emotivo documental que emociona desde las vivencias de sus personajes, protagonistas de la hermosa historia de Trottoirs de Buenos Aires, que aunó a los argentinos en el exilio, que unió a los que extrañaban su país y que llevó el tango, y a gran parte de sus más notorios artistas, a una ciudad vibrante de cultura que les abrió los brazos, dándoles no sólo un lugar de encuentro, sino también una vereda a turistas de todo el mundo.