EL GOBIERNO PORTEÑO ALQUILA A CLARÍN UN GALPÓN AL LADO DEL MURO QUE DEBE DEMOLER EN BARRACAS
El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires alquiló un galpón a una empresa del grupo por 1,5 millones de dólares anuales en el lugar donde está el muro que divide una calle en Barracas, con el pretexto de la “urgencia” para reacondicionar vagones del subte.
EL MURO SIN LOS LAMENTOS
El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires alquiló un galpón a una empresa del Grupo Clarín por 1,5 millones de dólares anuales en el lugar donde está el muro que divide una calle en Barracas, con el pretexto de la “urgencia” para reacondicionar vagones del subte, informó hoy el diario Página 12.
Según el matutino, para hacerlo el Ejecutivo porteño sorteó mecanismos de control con el pretexto de la «urgencia» de conseguir un lugar para los vagones de la línea B del subte que debían ser reacondicionados tras su llegada al país, pese a que su arribo se conocía con anticipación.
“Estamos acostumbrados a los manejos desprolijos e irregulares de Sbase, pero en este caso particular, se revela la especial relación del gobierno de Macri con el Grupo Clarín”, señaló el auditor porteño Eduardo Epszteyn.
Según la reconstrucción del auditor, la procuración porteña emitió un dictamen a posteriori del alquiler de parte de un galpón de 7.000 metros cuadrados en Agustín Magaldi 2.139 por la suma de 115.000 dólares más IVA por mes.
El contrato de alquiler fue firmado por Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (Sbase), la empresa estatal que controla el macrismo, con un fideicomiso de nombre LOMA XXI, que comparte la dirección fiscal con el Grupo Clarín y con AGEA.
El lugar fue alquilado para recibir los vagones utilizados en Madrid, España, desde la década del 80, y la contratación del galpón se hizo utilizando un mecanismo previsto para casos de urgencia, que evitó el dictamen previo de la procuración.
El diario menciona que la resolución 2124/14 de Sbase, firmada por su presidente Juan Pablo Piccardo, corrobora lo planteado por el equipo de Epszteyn: el contrato se firmó el 14 de agosto de 2014, tiene una duración de 36 meses, y un canon de 115.500 dólares por mes a partir del 1 de marzo de este año, mientras que la inmobiliaria que hizo las gestiones para Sbase se llevó otros 173.250 dólares en comisiones.
