El presidente Alberto Fernández condecoró al exmandatario uruguayo José Mujica con un Collar de la Orden del Libertador San Martín, máximo galardón otorgado por el Estado argentino para los funcionarios o extranjeros que lo merezcan por su labor.
En el acto, Fernández advirtió que Mujica representaba a un modelo de conducta para quienes amaban a la política, y destacó «su capacidad para volver a unir a ambos países».
Al mismo tiempo, el jefe de la Nación advirtió que el honrado era «un hombre inmenso» y un «actor central en el debate sobre la globalización y el consumo.
Por su parte, el homenajeado subrayó que los argentinos y los uruguayos habían sido «paridos por la misma placenta en un parto doloroso», llamó «amigo» a Fernández y le pidió a la ciudadanía de Argentina que se quisiera más entre sí.
