El mundo cooperativo en Argentina está en auge y crece cada día más. Muchos proyectos deciden conformar una organización ligada a la economía social para gozar de los beneficios que plantea, pero para eso es necesario poder entender las diferencias que existen entre los distintos tipos de sociedades: las cooperativas y mutuales presentan diferencias entre sí, y una de estas se da en las categorías de sus asociados.
Desde el punto de vista del mutualismo, existen diferentes categorías de asociados y esto se da por como se fue conformando históricamente las características de las mutuales en el país. «El mutualismo surgió en nuestro país gracias a las colectividades y grupos de oficios: la comunidad italiana que se estableció acá conformó una mutual, como así también el gremio de los zapateros: aceptaban socios adherentes, pero el manejo tenía que pasar por ellos», explicó en diálogo con Frecuencia Zero Hugo Iacovino, licenciado en Cooperativismo y Mutualismo.
En este sentido, entonces, las mutuales hoy constan de tres categorías distintas de asociados: los activos, que tienen derechos políticos y pueden integrar el concejo directivo o la junta fiscalizadora y participar en las asambleas, «tomar en las decisiones importantes»; los socios adherentes, que depende de lo que diga cada estatuto, pueden ser los que no reunan las características de la primera categoría pero pueden estar vinculados también con la organización sin tomar decisiones; y por último existen los asociados participantes, es decir, aquellos que están unidos por un vínculo familiar del asociado activo.
A diferencia de las cooperativas, las mutuales comparten una representación interna más fuerte, ya que es necesario que cinco miembros titulares integren el concejo directivo, incentivando una mayor participación por parte de los directivos: «Las mutuales exigen después de media hora de asamblea un mínimo de la cantidad de miembros titulares del concejo y de la junta fiscalizadora, ocho personas mínimo, lo que invita a que los desarrollos de las asambleas sean más importantes», concluyó Iacovino.
