El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) confirmó que la pobreza durante el primer semestre de 2021 fue de un 40,6% y la indigencia, de un 10,7%.
De los 28.900.000 argentinos encuestados, 11.700.000 estaban por debajo de la línea de la pobreza, y 3.100.000, de la de la indigencia. Es decir que una Ciudad de Buenos Aires entera no tiene ingresos para alimentarse.
Sin bien la cifra general bajó un 2% con respecto a la medida anterior, los encontrados en la situación más extrema habían representado al 10,5% de la ciudadanía en la última medida. A la vez, el INDEC reportó que un 54,3% de los menores de 15 años eran pobres, y que un 48,5% de los de entre 15 y 29 años estaban vulnerables.
Por su parte, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, el economista José Castillo destacó que el rebote del 10% de la economía no había impactado en la medición del INDEC. En ese sentido, sostuvo que, con estos niveles, Argentina necesitará 15 años para llegar al 30% de pobres.
Al mismo tiempo, Castillo recalcó que había 80.000 nuevos indigentes, por lo que, en su teoría, las políticas sociales durante la pandemia, como el ingreso familiar de emergencia (IFE), habían fracasado. En esa línea, el especialista subrayó que las nuevas medidas, como la suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias, no movían el amperímetro.
Además, el analista resaltó que la indigencia es la máxima en 15 años, y que, en 2001, los índices se ubicaban en las mismas cifras, pero sin planes sociales. Asimismo, recalcó que la pobreza se reducía con crecimiento; pero, según él, los más vulnerables no captaban actualmente el fruto de las reaperturas de actividades.
