Alberto Fernández y casi todos los gobernadores firmarán este lunes el Consenso Fiscal, que faculta a las provincias a subir y crear nuevos impuestos. Sin embargo, desde el Gobierno aseguran que este documento «equilibra el sistema fiscal a lo largo del territorio».
Con el respaldo de oficialistas y opositores, el Presidente apunta a fortalecerse dentro del Frente de Todos. Y utilizará el pacto para mostrar iniciativa y consenso político frente a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Hoy a las 17, Alberto Fernández junto al jefe de Gabinete, Juan Manzur, y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, recibirán a gobernadores y vicegobernadores en Casa Rosada. Luego del rechazo legislativo al Presupuesto 2022, el Presidente buscará volver al centro de la escena política.
El Consenso Fiscal «devuelve autonomía a las provincias y también equilibra el sistema fiscal a lo largo del territorio».
“Trabajamos construyendo acuerdos con las provincias, atendiendo la diversidad y las necesidades de nuestro extenso país con una mirada federal. Por tercer año consecutivo, vamos a firmar el Consenso Fiscal con todos los distritos, excepto CABA”, manifestó este domingo De Pedro, remarcando el rechazo de Horacio Rodríguez Larreta.
El Consenso Fiscal se aplicará a partir del año próximo. Y le permitiría a las provincias crear nuevos impuestos, como por ejemplo, un “impuesto a la herencia”, y también incrementar otros, como las alícuotas de ingresos brutos de algunas actividades. A pesar de ello, en Casa de Gobierno aseguran que se trata de una “armonización tributaria”.
Por su parte, la secretaria de Provincias de Interior, Silvina Batakis, explicó que el Consenso «tiene que ver con el que se firmó en el año 2017, en donde se estipulaban muchas cláusulas con las que los gobernadores no estaban de acuerdo». Agregó: «Entonces, en el 2019, cuando nosotros recién habíamos asumido, tuvimos conversaciones con todas las provincias y se empezó a corregir desde el consenso».
El Consenso Fiscal fue impulsado durante la gestión de Mauricio Macri con la idea de ordenar las estructuras tributarias de las jurisdicciones. En 2017 todas las provincias, excepto San Luis y La Pampa, se habían comprometido a bajar de modo gradual la presión impositiva hasta el 2022. Pero con la disminución en la recaudación, luego del estallido de la crisis económica y la devaluación de 2018, quedaron con los números en rojo.
¿Qué hará la oposición?
Los gobernadores opositores, Gerardo Morales, Gustavo Valdés y Rodolfo Suárez, explicaron que “no firmarlo (el consenso fiscal) para nosotros es volver a la aplicación del Consenso Fiscal 2017, que establece una baja de impuestos no gradual, sino inmediata”.
En el caso de Jujuy, impactaría en una reducción de recaudación en torno a los 6.000 millones de pesos. Asimismo, Corrientes y Mendoza tendrían una situación similar: no pueden bajar su nivel de ingresos y su único camino para no perder recaudación es acompañar al Presidente. Desde las tres provincias aseguraron que no aumentarán impuestos.
Por su parte, Horacio Rodríguez Larreta aseguró: «En la Ciudad no vamos a aumentar impuestos. Por eso, no lo vamos a firmar». Sin embargo, a diferencia de las demás jurisdicciones, la Ciudad de Buenos Aires tiene una caja que garantiza una mayor autonomía.
El Presidente necesita mostrar consenso y respaldo político en el marco de las negociaciones con el FMI. El evento de esta tarde buscará ser utilizado como antecedente del Plan Plurianual y un eventual nuevo Presupuesto que serían enviados al Congreso de la Nación en los primeros meses de 2022.
