Según un informe confeccionado por la ONG Defendamos Buenos Aires, la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense comenzaron el año con una «profunda recesión». Durante enero, sufrieron el cierre de 2.536 comercios, lo que significa 82 negocios menos por día. En este contexto, los rubros construcción, motos y autos, electrodomésticos y textiles son los más perjudicados.
En referencia al distrito porteño, reveló que 745 comercios bajaron sus persianas en 35 barrios. Las Cañitas (38 locales), Puerto Madero (36), centro de la Ciudad (35) y Belgrano (18) aparecieron como las zonas más afectadas.
«No sé qué están esperando, qué sea un desierto la Ciudad de Buenos Aires», se preguntó Germán Borrego, presidente del centro Comercial de la Avenida Nazca. Sobre esta base, reclamó la sanción de la ley de emergencia pyme, teniendo en cuenta que el sector aporta el 80% de mano de obra genuina y no se contempla como una política de Estado.
Tarifazos, altas tasas de interés, pérdida del poder adquisitivo en los consumidores y presión de la AFIP derivaron en esta situación. «Vemos que es una medida tras otra para castigar al sector», reflexionó el representante, quien no encuentra una solución con este panorama.
Si bien existen los centros de comerciantes, las entidades madres son la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (FECOBA) y la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Por eso, Borrego las culpabilizó ante la falta de representatividad y consideró que sus representantes deberían renunciar.
