La Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires comenzó su funcionamiento este martes en la sede de La Alameda, ubicada en la esquina de Lacarra y Av. Directorio, para atender las problemáticas de la ciudadanía.
Ignacio Domínguez, titular del área de Descentralización de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, aseguró que esta subsede permite el acercamiento del vecino para defender sus derechos. Según planteó, la idea del Defensor del Pueblo, Alejandro Amor, fue descentralizar a fin simplificar la movilidad de la ciudadanía. Por eso, tienen más de 20 sedes abiertas en todo el distrito, incluido los barrios populares.
«Hoy, la Defensoría es un ente donde el ciudadano se siente identificado porque es un ente de derechos», afirmó Domínguez al explicar los objetivos de este nuevo lugar.
Si bien actualmente funciona en La Alameda, la intensión es buscar un «espacio físico para instalarnos dentro de Parque Avellaneda, en la Comuna 9», permitiendo un mayor acercamiento a la comunidad. Por el momento, el trabajo se realizará los martes de 13 a 16 hs.
