El defensor del pueblo en la Tercera Edad, Eugenio Semino, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, hizo un recorrido sobre la realidad del PAMI, ANSES y aquellas problemáticas que atraviesan a nuestros adultos mayores.
Desde hace mucho tiempo la vida de los adultos mayores es atravesada por una serie de inconvenientes que, sumado a aquellas cuestiones propias de la edad, como algunos problemas de salud, generan malestar en ese sector de la sociedad.
Entre los recursos, de los gobiernos de turno, para conseguir liquidez, se encuentra como una de las grandes cajas del Estado el PAMI y el ANSES, indicaba el defensor del pueblo. De esta manera se van quedando sin el sustento económico que necesitan estos organismos, para asegurar la cobertura de las necesidades propias de ese sector. Sector castigado por gran parte de los gobiernos que sucesivamente utilizaron los fondos disponibles para otros fines.
En este marco es en el que emerge el negocio farmacéutico. Los adultos mayores son un mercado cautivo de medicamentos ya que están obligados a consumirlos, recetados por sus médicos de cabecera y es en este sentido en que «la enfermedad es el negocio» comentaba Eugenio Semino.
