Two/One de Juan Cabral

Este drama cuenta la historia de Kaden (Boyd Holbrook), un saltador de esquí profesional, atormentado por la pérdida de un viejo amor, y de Khai (Yang Song), un ejecutivo en Shangai atraído por una misteriosa chica de internet que un día comienza a trabajar sorpresivamente en su oficina. Los dos hombres viven en extremos opuestos del planeta y parecieran desconocer una singular conexión que los une. Mientras uno duerme, el otro está despierto. Según su director, estos personajes se sueñan el uno al otro y parecieran ser, de algún modo extraño, la misma persona, por lo que se pregunta ¿Quién es el sueño y quién es el soñador?

En base a la premisa que nos plantea su realizador, podríamos decir que si bien la conexión es un tanto surrealista no deja de ser poco explorada en su propia lógica, pues si uno está despierto mientras el otro duerme y viceversa, cierto raciocinio nos lleva a pensar en la cantidad de horas que duerme en promedio el ser humano. ¿Seis? ¿Ocho? ¿Diez horas? Claramente uno de los dos protagonistas está siendo estafado durante el día (?) pero bueno, supongamos que compramos la tesis y nos dejamos llevar por el código que nos plantea Cabral; todxs estaríamos conectades con otra persona al otro lado del mundo de una manera tan directa que al “apagarnos” el otre se “enciende” y viceversa. Este tipo de entrelazamiento me hizo recordar algunos principios básicos de la física cuántica y pueda que, desde ese lugar de espectadora espiritual, haya conectado con el film.

Desde el punto de vista de la mecánica cuántica, a grandes rasgos, todxs estamos relacionados porque el mundo es un organismo energético y las personas son energía, por eso lo que unx haga, o según la forma en que vibre, afectará a un otre y viceversa. Y esto resultaría en la película porque los protagonistas quizás sean una sola partícula y, aunque estén en lugares diferentes, compartirían la misma función de onda. Bueno, no lo digo yo, lo expresa la física cuántica, simplemente comparto algunos de sus pensamientos.

Two/One es una película enigmática, que nos habla principalmente sobre la soledad del individuo y su necesidad pulsante de conexión con un otre. Posee una fotografía sublime y un diseño sonoro hermosamente detallista. Quizás su falla recaiga en la falta de síntesis y en no prestar atención al cosmos de su propio guion por obsesionarse demasiado en la fotogenia del mismo.


























Puntuación: 3 de 5.

Ópera prima de Juan Cabral en la que se relata un bello drama surrealista que nos deja más preguntas que respuestas.

Publicaciones relacionadas

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba